Las palabras necesitan de un contexto histórico, político, social, cultural, económico y biográfico para significar. Exhorto a lxs lectorxs/militantes a realizar un viaje de conocimiento acerca de lugares, tiempos y autorxs para enriquecer la experiencia literaria que propongo en este espacio. Gracias.

sábado, 3 de abril de 2021

PEQUEÑA TRAGEDIA URBANA

PEQUEÑA TRAGEDIA URBANA

La pantalonera se murió en la calle.
Pasó el automóvil de un rico magnate,
con tacos de goma, silencioso... Nadie
lo oyó que llegaba. Gritos. Pitos. Sangre.
La pantalonera se murió en la calle.
Como al otro día del taller faltase,
tuvo un cartelito la puerta de calle
con estas palabras: “Hay una vacante”.

de Gustavo Riccio,
en http://literaturarioplatense.blogspot.com/2009/06/gustavo-angel-ricci-de-un-poeta-en-la.html (10/1/21).

viernes, 2 de abril de 2021

"Firmes...

 “Firmes
Soldados
Firmes”
Como si el rigor mortis
Fuera voluntario

Por Félix Sánchez Durán.

Las Malvinas

Las Malvinas

Tiene las alas salpicadas de islotes.
Es nuestra bella del mar.
La patria la contempla desde la costa madre
con un dolor que no se va.

Tiene las alas llena de lunares.
Lobo roquero es su guardián.
La patria la contempla. Es un ángel sin sueño
la patria junto al mar.

Tiene el pecho de ave sobre la onda helada.
Ave caída es su igual.
El agua se levanta entre sus alas.
Quiere y no puede volar.

El pingüino la vela. La gaviota le trae
cartas de libertad.
Ella tiene los ojos en sus canales fríos.
Ella está triste de esperar.

Como a mujer robada le quitaron el nombre;
lo arrojaron al mar.
Le dieron otro para que olvidara,
que ella no sabe pronunciar.

El viento es suyo; el horizonte es suyo.
Sola, no quiere más.
Sabe que un día volverá su hombre
con la bandera y el cantar.

Cautiva está y callada. Ella es la prisionera
que no pide ni da.
Su correo de amor es el ave que emigra.
La nieve que cae es su reloj de sal.

Hasta que el barco patrio no ancle entre sus alas,
ella se llama Soledad.

de José Pedroni,
en Poesía social y revolucionaria del siglo XX (selección de Jorge Brega), Editorial Agora, 2012.

jueves, 1 de abril de 2021

Adiós a la tierra de nadie

Adiós a la tierra de nadie

Ya no duermen tranquilos quienes duran
en la tierra de nadie y se reduce
el espacio fiable entre los frentes

Ya no llaman perdidas a las balas
que matan cada vez con más sangría
a perplejos imparciales inocentes

Ahora la gente se estremece vive
interrogando ansiando de reojo
temiendo en el futuro su presente

Ahora sí que hace frío en la ordenanza
sin colchones bastiones parapetos
el campo de batalla se ha hecho íntimo

y pronto llamarán a nuestra puerta

De Conrado Santamaría Bastida,
en Entre los Poetas Míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol.109, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2018.

miércoles, 31 de marzo de 2021

BYRON

BYRON

Poeta, bello y joven ¿qué pudor tu imperiosa
Mirada resistía? ¡tú mismo eras Don Juan!
Soñaba en ti la Virgen y en ti la casta esposa,
Que á* todas hechizabas ¡oh hermano de Satán!

Ayáxida del Verso, tu soberbia harmoniosa*
Tuvo para la Plebe, blasfemias de Titán,
Y frente al áureo vulgo, levándose gloriosa,
Tu cólera hecha cumbre se transformó en volcán!

¡Todo lo fuiste ¡oh Byron! ¡Por algo eras Poeta!
Todo lo grande y noble vivió tu vida inquieta.
Para morir luchando por tu nación después;

¡Porque las playas santas de Grecia eran tu nido!
¡Porque tu Genio insigne proscrito y maldecido,
Fué* un motín de las Gracias contra el beocismo inglés

de Ángel Falco,
en Vida que canta, O. M. Bertani Editor, 1908.
*Del original.

martes, 30 de marzo de 2021

Rincón de haikus - 2

2

la muerte invade
de vez en cuando el sueño
y hace sus cálculos

de Mario Benedetti,
en Rincón de haikus, Biblioteca Mario Benedetti, epublibre / Cal y canto, 1999.

lunes, 29 de marzo de 2021

Utilidad

Utilidad

Los cuerpos tiesos
Cortocircuito telefónico
Una idea que es como una mosca
Y que zumba y me vuela alrededor y me rompe las pelotas

Feísmo poético
Para enaltecer el vómito

Jeringas y psicofármacos
Para pulverizar mi espíritu

de Nahuel Maid,
en Poemas del patetismo inusitado 4315, Edición de autor, S/F.

domingo, 28 de marzo de 2021

Ella y el miedo

Ella y el miedo

Creció con ella
subrepticio
recóndito
con apariencias tan cambiantes
que nadie lo reconocía.
Ni ella misma
que se creía valiente.
No iba acompañado
de monstruos o fantasmas,
no surgía
de cuartos oscuros
ni de abismos.
Invisible temblaba
en su palabra tímida,
se volvía un velo
ante el paisaje luminoso,
una barrera
ante el fruto apetecido,
una sonrisa
ante la decepción.
Paralizaba la mano
que iba a tenderse
hacía una mano amiga.

Bajaba por los párpados
sobre la mirada
en que por un instante
brillaría la dicha.

Aunque era una niña quieta,
tenía miedo
de hacer ruido
porque alguien dormía a su lado.
Tenía miedo
de correr por la casa solitaria
donde sus pasos despertaban
resonancias extrañas.
Como era una niña silenciosa
tenía miedo de cantar,
porque su voz despertaría
resonancias extrañas
en su alma solitaria.
Y temía las palabras,
las duras palabras que hacen daño
y las dulces palabras
que querían anidarse
en su corazón erizado.
Las palabras de los otros
y las suyas.
Miedo de lastimar
y miedo
de ser lastimada.
Y si la asustaban
las puertas cerradas
a las que no osaba tocar,
ay, cuánta desazón,
ante una puerta abierta…
Vivía
como en un retrato de juventud:
vestida de baile
adornada de rosas,
fina, dulce y sonriente,
pero inmóvil
en el umbral iluminado
de esa fiesta
donde el miedo
la dejó para siempre detenida.

de Alaíde Foppa,
en https://periodicodepoesia.unam.mx/texto/la-desvanecida-imagen/ (20/12/20).

sábado, 27 de marzo de 2021

¿Y USTED PODRÍA?

¿Y USTED PODRÍA?

¡Barrí de golpe el mapa cotidiano,
echando la pintura de un vaso;
mostré en la fuente con gelatina
los pómulos oblicuos del océano.
En las escamas del pez de hojalata
leí llamados de labios nuevos.
Y usted,
¿podría tocar
un nocturno
con la flauta de los caños de desagüe?

de Vladimir Mayacovski,
en La flauta espinazo y otros poemas, elaleph.com, 2000.
[TRAD. IRINA BOGDASCHEVSKI]

viernes, 26 de marzo de 2021

AL APÓSTOL

AL APÓSTOL

Abre tus nobles brazos que ya la cruz te espera
                              Como á Nuestro Señor;
Lanza tu gran palabra magnífica y severa,
Imprecación rotunda de espanto ó de clamor.

La multitud atónita escuche tu postrera
                     Parábola de amor.
Y haz después que la sombra difunda por la Esfera
El pavor de tu trágica hora de redentor...

Cuando la cruz tremole cimbrada por el viento,
Ya no verán tus ojos la luz del firmamento,
Se cerrarán por siempre tus ojos á la luz.

Y sentirás entonces —si sientes— el profundo
Dolor de haber creído dar tu verdad al mundo
Cuando tan sólo dabas tus brazos á una cruz.

de Mario Bravo,
en Nuestro Parnaso - Colección de Poesías Argentinas (Cuarto Volumen), Ernesto Mario Barreda/Ediciones M. Gleizer, 1914.

jueves, 25 de marzo de 2021

Amor en otras palabras

Amor en otras palabras

Con esas manos de acariciarte la espalda
llevare un fusil tal vez mañana,
con esta boca que no encuentran palabras
que te besa
llamo a gritos a mi gente
vivo a mi patria.
Con estas piernas las de irme temprano
marcharé si es debido a dar batalla,
y con los mismos ojos de mirar
apuntaré al corazón
al que me ataca.
Y este cuerpo que también es nuestro cuerpo
se pudrirá en la tierra, si me matan.
Así es cada hombre así lo hicieron
en la alegría y el dolor sobre la espalda.
Un grito y un silencio, un momento
para jugar en la vida a todo o nada.
Yo que hasta ayer dije amor
ahora hoy digo patria
que es como decir amor
amor en otras palabras.

de Rafael Bielsa,
en http://danielfrini.blogspot.com/2008/06/amor-en-otras-palabras-rafael-bielsa.html (6/12/20).

miércoles, 24 de marzo de 2021

'76-'83

'76-'83

Aquellos años
En que usamos
Botas por sombreros

Por Félix Sánchez Durán.

Ni olvido ni perdón

Ni olvido ni perdón

En qué lápida sin nombre, 
bajo qué olvidado río
de resplandor agonizante
como la ceniza de tu rostro de estrella,
duermes aún escondido
en las fauces  del frío  corrompido.

Predicador de veranos deslumbrantes
con milagro y batalla,
atesorabas relámpagos
colmados de cielos con justicia 
y días despojados de tormenta
por las risas de amores compartidos.

Soñador de igualdad y de aliento constante,
las tropas de la muerte,
de rencor estancado y cuchillo presente,
te comieron el pecho, desgastaron tu vientre,
sustrajeron las llaves
de la sangre en tu cuerpo.

Y en el tránsito tenaz de los infiernos
con torturas de fuego inexorable
y noches de terror enloquecido,
te hurtaron los latidos
te usurparon los hijos
incendiaron tu nido...

Conmovías arpegios de sigilo absoluto
y ansias detenidas sin día ni horizonte,
la garra del invierno se alojaba en tu alma
sin lápida y sin nombre,
prisionero de la demente historia
del tiempo del espanto.
     
Sabías sin embargo,
con saber infinito de placer desterrado,
que tu cuerpo de llaga 
tañía las campanas
de pan y de justicia,
que llaman a despertar cada mañana.

Ignoraban verdugos de cabeza de arena,
a la tierra que llora tu prisión militante
con heridas que procrean semillas,
con hijos que toman la palabra
y derrumban paredes de cómplices silencios
y gritan la verdad y la esperanza.

De Mary Ablin,
en Poemas Militantes, Ciccus, 2013. 

Loa a la clandestinidad

Loa a la clandestinidad

Es hermoso
tomar la palabra en la lucha de clases.
Llamar a las masas bien alto a la lucha
para que aplasten a los opresores y liberen a los oprimidos.
Y es difícil y útil el trabajo diario, imperceptible,
el tenaz y secreto tejer
la red del Partido
ante el cañón de los patrones:
hablar, pero
esconder al orador.
Vencer, pero
esconder al vencedor.
Morir, pero
esconder la muerte.

¿Quién no haría mucho por la fama, pero quién
lo hará por el silencio?
Pues la fama pregunta en vano
por los que realizaron la hazaña.
¡Aparezcan
por un momento,
desconocidos de rostros cubiertos, y reciban
nuestra gratitud!

(c. 1932)

de Bertolt Brecht,
en Poesía social y revolucionaria del siglo XX (selección de Jorge Brega), Editorial Agora, 2012.

ESTADO DE SITIO

ESTADO DE SITIO

Órdenes, botas, rejas.
Afuera la mañana continua.
Adentro el gran amor
se mueve y alza todavía.

La esperanza es un niño ilegal, inocente.
Reparte los volantes, anda contra la sombra.

de Juan Gelman,
en Poesía armada, Agermanament, 1976.