En la calle ilegal dibujé una serpiente
Alerta y callejera, buscando a contramano
El regreso a mi casa. La sombra de los árboles
El farolito roto, toda la oscuridad
Borró mis huellas. Vi lejanos patrullajes
Sigilosos y esquinas con hombres arraigados.
Al cruzar la avenida me señalaron todas
Las luces de mercurio (rutina solamente).
Mis bolsillos estaban vacíos. Y mis manos.
¡Quién iba a sospechar que el arma subversiva
Iba en mi corazón! ¡Que el papel insurgente
Eran recuerdos como ampollas sangrantes!
¡Los dueños del poder por las armas no tienen
Hombres sino corderos con un miedo feroz!
Sin causas, sin proyectos. Y en la noche ilegal,
Mientras tanto, los hijos del pueblo se deslizan.
de Daniel Favero (detenido-desaparecido el 25 de junio de 1977),
en Poesía y Militancia, EDULP, 2020.