De lágrimas (IV)
cuando el acaudalado
ha comprado un yate
en lo más profundo del desierto
sólo el ingenuo ríe
huye el avivado
porque sabe
que del llanto del pueblo
surgirá el río
por el que navegará
el lujoso barco
por Félix Sánchez Durán.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario