Las palabras necesitan de un contexto histórico, político, social, cultural, económico y biográfico para significar. Exhorto a lxs lectorxs/militantes a realizar un viaje de conocimiento acerca de lugares, tiempos y autorxs para enriquecer la experiencia literaria que propongo en este espacio. Gracias.

miércoles, 13 de febrero de 2019

La comida del prisionero

La comida del prisionero

De arroz rojo una taza, oh miseria, es la única comida.
Ni legumbres, ni sal, ni un mal caldo siquiera.
El que tenga allá fuera quien le mande, comerá en la prisión.
Aquel que a nadie tenga, como un niño, clamará por sus padres.

de Ho Chi Minh,
en Diario de prisión, Instituto del libro (CUBA), 1970.

martes, 12 de febrero de 2019

Los que se alcantarillan cuando las ratas vencen

Los que se alcantarillan cuando las ratas vencen

LOS QUE SE ALCANTARILLAN CUANDO LAS
RATAS VENCEN,
aquellos que no oyen la sintonía
de angustia en cada ebria multitud.
Los que creen que el hambriento
sólo piden pan.
Aquellos que eligen su mordaza
amparados en el no tengo nada que decir
y en los hijos de la violencia legal.
Los que nos anudan corbatas
como nudos corredizos.
Aquellos que al restallar del látigo
se convierten en barrotes de nuestra jaula.
Los que no ven más allá del fin de la Historia
ni del fin de semana. Aquellos que malversan
bienroban y mejorviven.
Son los que exigirán que caiga sobre nosotros
el estruendo diario de la muerte
que se pasea en silencio por los despachos,
las celdas y las aulas.
Son los que desean barrer nuestras cenizas
bajo la alfombra roja de los palacios.

de David Franco Monthiel,
en Once poetas críticos en la poesía española reciente (Enrique Falcón, coord.), Baile del sol, 2007.

domingo, 10 de febrero de 2019

El Desdeñoso

El Desdeñoso

(A Catherine Bailly)

Bebo en tu honor, dios mío
Tú que me has hecho tan triste
Me has dado un pueblo que no es destilador de caldos
Y entonces, ¿qué vino beberé yo en tu jubileo?
En este suelo que no es suelo de viñas
En este desierto en el que todos los arbustos son cactus
¿Es posible que llegue a ver en sus flores cada año
Las llamas de la zarza ardiente de tu celo?
Dime por qué Egipto mi pueblo arrastra sus cadenas

Cristo me río de tu tristeza
Mi dulce Cristo.
Espina a cambio de espina
Tenemos una corona de espinas compartida
Me convertiré pues me tientas
Allégate a mi José
Ya estoy mamando del pecho de tu madre la virgen
Sin contarte a ti ya cuento algún Judas más por mis dedos
Mis ojos le mienten a mi alma
Donde el mundo es cordero tu cordero pascual—Cristo
Bailaré yo mi vals al son de tu tristeza lenta

Pero ¿soy yo tu hermano simplemente?
Ya me han matado en tu nombre
¿Acaso era culpable de mi muerte?
Tenía flores de amor hechas sólo de sombra en los ojos
Mis manos agitaban los abanicos de las latanias al atardecer
Por haber besado tu cruz la sangre me enrojece la boca
¿Acaso no era yo tu hermano? Danzo en honor de tu tristeza
No llamo en mi defensa como testigos ni a padre ni a madre
Y sin embargo mi dolor iguala al tuyo
El agua de mi río es dulce—golondrinas llegad
El peñasco ama al mar que la azota—tan lasa

Me tientas
Y disfruto
Me extravío por la música de tu alma
Y son sólo las truchas las que cantan no obstante desafinadas
Y muerto bailo yo por la tristeza lenta

Los vicios en mi piel son los tres clavos de hierro en tus pies
en tus manos
Qué sucio estás, Cristo, por haberte juntado con los ricos
Su lujo es un ternero de oro colgado de los cuellos de sus ricos
Camina por el camino de mi pueblo por el que voy cojeando
Me dirás en qué Egipto se aflige mi pueblo
Mi corazón no es el desierto habla Cristo

¿No fuiste tú el que puso el oro vívido en mi vino de alegría?
¿Te debo mis dos fuentes?
Tanto mi corazón como mi alma
¿No fuiste tú el que le hizo a mi corazón dos ventrículos tan
[ diminutos?
Un árbol de vida muerto florecía mi olvido.

Permaneces inmóvil
Hiende el Congo su pena
Pero qué sucio estás, Cristo, por haberte juntado con los ricos
Cristo Cristo de mi Santa Ana Dime qué vino podré beber
Para mentirle a mi pueblo
Mi alegría es demasiado evidente
Mi tristeza demasiado sucia
Para ser un fuego de sabana

Perros iban tras de mí
Cuando era mendigo
Para celebrar la Eucaristía yo mendigaba el vino la levadura y la sal
Judío errante fui
Para traicionarte a ti que me habías traicionado
Ya me han matado en tu nombre
Traicionado y luego vendido

El atardecer marchitaba las rosas
Que perdían sus hojas de dolor

Mi María Magdalena se llamaba Anita
Menos sucia que la tuya y por consiguiente menos abierta al perdón
Moriré pues sin ella
No tiene levadura el pan de exilio
Y soy judío por simple locura
Mi locura es un pozo de oasis
Pero el oasis no es tu llaga en el costado izquierdo

Cristo escupo en honor de tu alegría
El sol es negro a causa de los negros que sufren
A causa de los judíos muertos que buscan la levadura de su pan.

Qué sabes de New Bell
En Durban dos mil mujeres, En Pretoria dos mil mujeres
También en Kin dos mil mujeres
Y en Antsirabé dos mil mujeres
Qué sabes tú de Harlem

Pesa el vino en mi corazón sufro porque gozo
Cristo odio a tus cristianos
No tengo amor para amar a todos tus cobardes
Escupo contra tu alegría
Por tener a mi derecha a mi izquierda
Las mujeres de los ricos
Me siento mal por haber bebido
Tu templo está lleno de mercaderes que venden tu cruz

Yo vendo mi negritud
A cien perras redondilla
Y la galera navega
Hacia unas Indias de saldo

¡Ay! ¿Qué continente no tiene sus falsos negros?
A mí me sobran hasta podría vender
Incluso África tiene los suyos
El Congo tiene sus falsos negros
Tan cristianos, ¿son acaso por eso menos sospechosos?
Oh muero en tu honor
Pues me has tentado
Al hacerme tan triste ~

de Tchikaya U Tam´Si,
en Voces del sur - Aproximación a la poesía africana (Equipo Fénix comp.), Biblioteca Virtual Omegalfa, S/F.

sábado, 9 de febrero de 2019

La palabra

La palabra

Ellos escriben aunque nadie los lea
Escriben en las paredes de la mina
Escriben con sus lámparas de carburo
Escriben bajo la noche profunda

Escrituras, Juan Gelman

LA PALABRA
abriendo canales en la piel muerta
de los días en silencio.
La palabra,
una quilla de luz
un destello en la vastedad oscura
de los informes, de las actas.
La palabra útil como la luz
del casco del minero,
esa mancha
que señala dónde hay que picar,
dónde golpear.

de David Franco Monthiel,
en Once poetas críticos en la poesía española reciente (Enrique Falcón, coord.), Baile del sol, 2007.

jueves, 7 de febrero de 2019

El lamento del sin hogar

El lamento del sin hogar

No me siento cómodo aquí
¿Debo volver a la heredad abandonada?

No tengo hogar aquí
Estuve largo tiempo en Sudáfrica
Aguardando a que la lluvia parara.

He fracasado en fundar un hogar aquí
Estuve largo tiempo en Japón, esperando un cambio
Fue un mal viento el que nos lanzó sobre el mar.

Fracasé por completo en fijar residencia
Mis pulmones estaban llenos por la tormenta del desierto
Y el calor y frío de Omdurman,
Hermanos Musulmanes Extremistas nos marginan de la sociedad
Como si la tierra fuera siempre suya.

¿Dónde está pues nuestra ciudad capital?
He fracasado en asentarme
He pensado regresar a Kajokaji
Donde dulces mangos maduran dos veces por año
La Guerra de Garang se enfurece
para que los aún no nacidos la continúen.

Toda nuestra juventud fue reclutada
Y enviada a perecer en los matorrales espinosos
Las bombas que llueven de arriba profanan nuestras tumbas.

Piedad pobre de mí, un hombre sin hogar
Proscrito de Bobi por Obote y Amin
Regresamos a nuestro hogar ancestral en el Sur de Sudán
Dejando las tumbas de padre y señor completamente cubiertas de hierba
El Jefe Olal y su maestro de ceremonias,
Yacen enterrados bajo el higo de Bobi Paidwe.

¿Dónde queda ahora exactamente nuestra heredad ancestral?

Compadezco al hombre que no tiene un hogar donde llamar:
El Nuevo Gitano o el Judío Errante.

¿Debo permanecer en el mismo sitio?
¿Regresar hacia dónde?
¿Hacia dónde avanzar?

de Taban Lo Liyong,
en Voces del sur - Aproximación a la poesía africana (Equipo Fénix comp.), Biblioteca Virtual Omegalfa, S/F.

miércoles, 6 de febrero de 2019

Dos sabios consejos

Dos sabios consejos

“Es sumamente sencillo
seguir viviendo sin amor.
Basta con que te rodees de
belleza que te deleita
sin cansarte nunca”.

De manera que me fui rodeando
de más y más belleza
Pero en lugar de deleitarme
me parecía monótona
y me apenaba.
Así que fui de nuevo al sabio
quien esta vez me dijo:

“Es sumamente sencillo:
la belleza sólo puede
seguir deleitando siempre renovadamente
a aquel
que también tiene amor”.

de Erich Fried,
en Entre los poetas míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol.8, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2012.

lunes, 4 de febrero de 2019

Efecto marmota

Efecto marmota

Bosteza, se duerme
alguien en el primer mundo
y cientos de miles del resto del mundo, mueren.

Por Félix Sánchez Durán.

domingo, 3 de febrero de 2019

Girasoles de papel

Girasoles de papel

Espera,
No juegues a ser otra persona
Porque has de correr
Para escaparte de vos
Aturdiendo la pura ingenuidad
Pensás que encontrar el camino liberal
Es lo que sirve en realidad

Hasta el girasol
Muchas, muchas vueltas da
Después vuelve a su lugar
Después vuelve a su lugar

Presa
Estás entre rosas figuradas
El sueño de un día, un día solo será
Despertar es realidad
Y no querés despertar
Y no querés despertar

Una vida dibujada es vacío
En campos de cera
Nunca verás crecer
Girasoles de papel

En campos de cera
Nunca verás crecer
Girasoles de papel

de Alejandro de Michele (Pastoral),
en Pastoral, CABAL, 1973.

viernes, 1 de febrero de 2019

A sí mismo

A sí mismo

Sin el glacial invierno, sin el duelo y la muerte,
¿quién apreciar podría, primavera, tu gloria?
Son un crisol las penas que mi espíritu templan
y con el acero puro el corazón me forjan.

de Ho Chi Minh,
en Diario de prisión, Instituto del libro (CUBA), 1970.

jueves, 31 de enero de 2019

Doctrinas

Doctrinas


a la memoria
de todas las personas
que valieron menos
que la propiedad privada


No, señor oficial,
no reaccione a un robo, a un asalto,
disparando
Es menester
proteger
y cuidar
el bienestar
de los ciudadanos
allí presentes

***

Sí, señor oficial,
tiene siempre permiso de disparar
Es muy importante custodiar
la "propiedad"
a cualquier precio

Por Félix Sánchez Durán.

miércoles, 30 de enero de 2019

Dime..

Dime
Qué triste desierto nos sitia
Ruido de pasos
Y ruido de armas
A lo largo de los días
A lo largo de las noches
Qué lágrimas nos arrullan
Qué sangre
Qué gritos
Detrás de las alambradas
A cada paso
Las botas
Sobre mi tierra
Dime
Cuántos niños muertos
En Soweto
Cuántos
Para enfrentar Johanesburgo
Y sus morgues
Para enfrentar la tierra profunda
Y buscar la palabra
Y buscar los rostros
Y sólo encontrar pálidas sombras
Encontrar sólo la muerte
Porque esos niños eran negros
Como en Sharperville
El hombre salió de la noche
Con sus innumerables manos
Con cien mil ladrillos
Justo en la precisa alba
Que martillea el tiempo
Como un tañido fúnebre
Con la sangre las lágrimas
Los muchos niños del país
El llanto el llanto el llanto
En la noche del silencio
La noche amarga
Y el instante nominal del holocausto
El fuego la sangre
Por todas partes
En las calles de Soweto
Donde el horizonte
Se viste de duelo
Y siembra el odio
Y la rabia
Porque esos niños eran negros
Porque esos niños eran negros
Quiero que me den un fusil
Para armar mi dolor
Quiero que me den la palabra
La flor el amor infinito
Y sobre todo
Haz que no escuche más
El llanto de los niños de Soweto
Haz que mi queja brote
De todas las alturas
Del mundo
Lejos del inmenso río
Del silencio
Lejos de la noche
Y de la sangre

*

Volveremos
Con la palabra
Sola
Erguida como un trueno
Tenue
Con el pan
Solo
Modelado con lágrimas
Y sangre
Derramada
Con una simetría
De sol
Puro
Volveremos
Mañana
A unirnos al hombre
Anónimo que tiembla en la noche
Sobre mi tierra de cierzo
Y de frío
Cruel
Mi ciudad en ruinas
Dirigida hacia el horizonte
En llamas
Con la densidad de nuestra hambre
Cotidiana
Volveremos
Con nuestros montes
Y los espacios inaccesibles
Y mi canto de acusación
Armado de piedras de ríos
De árboles de presencias invisibles
Nuestros muertos que surgen
Del sol
Con su odio sin descanso
Como tantas tempestades
Viene la hora del levantamiento
En masa
Viene la hora
La rabia de mi pueblo
Sembrado de guerrilla
Viene la tejida trama
De nuestros sufrimientos
Contra la Negritud cansada
Saldremos de las selvas las más anchas
En la inmensidad sonora
De mi tierra lisa de sangre
Con nuestro grito de sílabas
Densas
Frente a la muerte
Que patrulla en la noche

*

Y descompongo las palabras de mi cólera
Para desprostituir la lengua
Compréndeme no tengo alternativa
Era necesario lo sé que yo fuera el signo
Y el hombre palabra
Palabra de la tierra, de mi tierra hipotecada y desapropiada
Los niños han crecido y construyo el verano alrededor de ellos
Como un monumento al día
Golpeo tu puerta
Rebelde y libre
Como si sintieras el despertar de la tierra en tí
Vertida en tus venas
Volcán en el horizonte de nuestra espera
Como si la tierra fuera hierbas y ríos
Árboles y aldeas de infancia
Rutas y senderos
Todo se acomoda finalmente a la calma serena de nuestras soledades
Vuelvo a encontrar el sol y al país claro
Vuelvo a encontrar mi tierra en el eco de las estaciones
Pero qué me importa el tiempo
Dame la mano
Amo el silencio para elevar el canto
Pero acaso tú eres la fuente herida
Conozco la gran fisura revelada por los siglos
El tiempo es largo
Y el destino de mi tierra no la puede detener

de Paul Dakeyo,
en Voces del sur - Aproximación a la poesía africana (Equipo Fénix comp.), Biblioteca Virtual Omegalfa, S/F.

martes, 29 de enero de 2019

Reflexión

Reflexión

No existen "los misterios de la Historia".
Existen las falsificaciones de la Historia,
las mentiras de quienes escriben la Historia.

La Historia de la mal llamada "guerra del fútbol",
la han escrito la CÍA y el Pentágono
y los servicios de Inteligencia de los Gobiernos
de El Salvador y Honduras
y los plumíferos de las oligarquías de ambos países,
los agentes de publicidad de las industrias de Integración,
los expertos en Relaciones Públicas y Mercadeo a nivel Centroamericano,
los sesudos y generalmente anónimos editorialistas
y los cronistas y los reporteros
de la Gran Prensa Ístmica (Radio & TV Including),
las secciones de información y de Guerra Psicológica
de los Estados Mayores unificados en el CONDECA, etc. etc.

La falsificación de la historia de esa guerra
en su continuación por otros medios,
la continuación de la verdadera guerra que se desarrolló
bajo las apariencias de una guerra entre El Salvador y Honduras:
la guerra imperialista-oligárquico-burguesa-gubernamental
contra los pueblos de Honduras y El Salvador.

de Roque Dalton,
en A la revolución por la poesía, Ediciones de la Esc. Preparatoria N°8, 1983.

lunes, 28 de enero de 2019

Recepción solemne a Wilkie anuncia la prensa

Recepción solemne a Wilkie anuncia la prensa

Si como usted soy amigo de China,
y como usted iba yo a Chung King,
¿por qué a usted en el salón le acomodaron
y a mí en la celda de una prisión?
Si como usted soy delegado,
¿a qué se debe la distinción?
Esta parcialidad es bien humana:
“Siempre hacia el Este ha corrido el agua”.

de Ho Chi Minh,
en Diario de prisión, Instituto del libro (CUBA), 1970.

domingo, 27 de enero de 2019

In girum imus nocte et consumimur igni

In girum imus nocte et consumimur igni

Hemos venido para no hacernos los sordos
para golpear desde la palabra
para continuar en pie amándonos
para mirar el rostro de la muerte
y seguir soñando seguir viviendo.
Hemos venido para no regresar
para despertarnos en el paso adelante
y ser cada día un único cuerpo
que desea una luz en carne viva
un verbo de plural desinencia.
Hemos venido para cambiar la vida
Nuestro terror es suave caricia
en sombrío tiempo de mordaces bozales.
Hemos venido para formar parte
para ser poema, para ser trabajo
hemos venido para esperanzarnos
para vivir de nuestras manos
para tener un nombre sin fiebres
deudoras o vómitos mensuales
para ser grito o cuchilla
que desentierre las podridas raíces.
Hemos venido para ser feroces
a pesar de mandíbulas y de segundos despojados
a pesar de domingos asignados a la muerte
Hemos venido para preguntarnos
para vivir a la intemperie
para ser un instante incómodo
en el tiempo pasajero de los ladrones.

de David Franco Monthiel,
en Once poetas críticos en la poesía española reciente (Enrique Falcón, coord.), Baile del sol, 2007.

sábado, 26 de enero de 2019

Una “buena noticia” nos traen los diarios

Una “buena noticia” nos traen los diarios

Alégrense
Exportaremos carne
A los Estados Unidos
Después de mucho tiempo

Alégrense
Hemos restablecido
Vínculos comerciales
Con “el mundo”
Nos abre sus puertas

Alégrense
Pero no se acerquen
A las góndolas
Ya no habrá carne allí
(Sólo algo muy parecido
A un precio vil)

Alégrense
Los dueños del campo
De las cabezas de ganado
De la Argentina
Llenarán sus arcas
Y habrá derrame de alegría

Por Félix Sánchez Durán.