Las palabras necesitan de un contexto histórico, político, social, cultural, económico y biográfico para significar. Exhorto a lxs lectorxs/militantes a realizar un viaje de conocimiento acerca de lugares, tiempos y autorxs para enriquecer la experiencia literaria que propongo en este espacio. Gracias.
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lunes, 27 de febrero de 2023

Poema a María Luz

Poema a María Luz

Cómo no decirte tantas cosas
si callarlas significa negarlas
si el dolor es el constante fuego
que quema nuestras etapas de lucha
Cómo no decirte todo esto que somos;
que la esperanza no es el hábito burgués de las cosas sin sentido,
y que esa esperanza en nosotros
es la expresión renovable del deseo de justicia
Cómo no decirte lo injusto que soy
al ceder muchas veces ante mi dolor personal
y olvidarme que mi vida es la entrega
al sufrimiento de todo un pueblo encarcelado
Cómo no decirte que tu prisión es tan solo
el rostro descarnado de una verdad
el símbolo prematuro de quienes dan el primer paso
la primera trinchera, de quienes no se resignan.
Cómo no decirte que el hecho de amarte
me da el derecho a sentirme golpeado
por todo lo que viviste, por no ser cobarde,
pero que no me haces olvidar muchas otras cosas
por ejemplo, la asquerosa violación
a la prostituta transformada en mercenaria
de todos los que como «ellos» tienen como única ley
la de satisfacer sus podridos instintos.
Tampoco me olvido que el hombre
es muchas veces peor que una picana
porque lacera más hondo y duele aún más
cuando se sabe que se nos niega lo que es nuestro.
Cómo no decirte que dudar dónde está la verdad
es la expresión de la cobardía
y que la mayoría de las veces, a la larga,
es saltar ese gran abismo que nos separa
de quienes están del otro lado: nuestros enemigos.
Cómo no decirte que nuestro deber es ahondar cada vez más ese
abismo
y alejarnos de él para sentirnos más cerca de la intimidad de
nuestro terreno: nuestro pueblo.
Cómo no decirte que mi primer amor es la lucha por ese pueblo oprimido
y mi segundo amor es también un ansia de lucha:
La de sentirte cada vez más cerca, compañera.
¡Cuántas cosas hemos compartido
y todas juntas se reviven cuando se está ausente!
y hacen desaparecer esa ausencia para convertirla
en recuerdos que nos permiten sintetizar
para volver a experimentar.
Estas frases podrían ir dedicadas a muchas personas
que formaron un pedazo de mi pasado
pero te he elegido a vos, porque juntos sentimos
todas nuestras experiencias con objetividad.
Depuración, colador o prueba ¡esas son las palabras!
Con que defino no tan solo nuestra experiencia y sus recuerdos
sino al método por el cual se pasa de la etapa «rosa» de la lucha
a la otra, a la más difícil, en la que no se admiten dudas.
Bastaría nombrarte cosas para que te des cuenta:
el café o el mate de los recuerdos, de las creaciones,
de las alegrías, de las tristezas, o de las reuniones «combativas»
el folklore de las peñas, de los discos «buenos»,
de las noches de vino compartido, y muchas otras.
Pero…¿Pensamos alguna vez que lo que el pueblo nos exigía
era mucho más?¿Pensamos acaso que para llamarnos vanguardia
no bastaba ir adelante solamente,
sino ir exactamente más oprimidos que los que venían detrás?
Pero era lógico; todavía teníamos encima los gustos, las
costumbres
y hasta el compromiso de nuestra proveniencia.
Pero … ¿y ahora? No somos sinceramente más coherentes
¿no es más verdadero todo?
¡No me negarás que sentir en carne propia
lo que otros hace siglos sienten,
no nos hace asumir más auténticos!
Después de nuestra última experiencia ¿No pensás igual que yo?
¿No pensás que el traidor de hoy es el que no supo
pasar ese colador, mediante la fortaleza que da dejar de lado
la alineación de los momentos lindos,
para cambiarla por la valentía y el orgullo
de no dar la espalda al pueblo?
Te aseguro que me siento más cerca de mi ideal
aunque esto me implique jugarme más a menudo por él
y aunque un día me exija mucho más que todo esto,
hasta la vida; pero en ningún momento quiero ser
un triste recuerdo cuando llegue esa realidad,
sino un libro con su principio, sus hojas completas y su fin,
al que aunque sea unos pocos se dignen leerlo,
para no volver a vivir experiencias ya sintetizadas;
para seguir el camino hacia la Victoria Final.
Días nuevos, días con ansia de creación,
días en donde el esfuerzo por superarnos
sea el ideal cotidiano.
Pienso, y me doy cuenta de las miles de cosas que me faltan
aprender.
Y me avergüenzo de pensar en la muerte.

de Mario Eduardo Menéndez Genolet (detenido-desaparecido el 12 de septiembre de 1977),
en https://revistalacueva.wordpress.com/2015/09/06/palabras-clandestinas-recopilacion-de-poemas-de-detenidosdesaparecidos-durante-la-ultima-dictadura-militar-en-argentina/ (14/5/22).