Las palabras necesitan de un contexto histórico, político, social, cultural, económico y biográfico para significar. Exhorto a lxs lectorxs/militantes a realizar un viaje de conocimiento acerca de lugares, tiempos y autorxs para enriquecer la experiencia literaria que propongo en este espacio. Gracias.

jueves, 9 de julio de 2020

Sueños

Sueños

Aférrate a tus sueños,
porque si los sueños mueren
la vida es un pájaro de alas rotas
que no puede volar.

Aférrate a tus sueños,
porque cuando los sueños se van
la vida es un campo estéril
congelado por la nieve.

de Langston Hughes,
en Entre los Poetas Míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol.77, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2014.

miércoles, 8 de julio de 2020

Con equipaje ligero

Con equipaje ligero

No te acostumbres.
No tienes derecho a acostumbrarte.
Una rosa es una rosa.
Pero un hogar
no es un hogar

Quítale el objeto al perro faldero
que te mueve la cola
en la vitrina.
Se equivoca. Tú
no hueles a quedarte.

Una cuchara es mejor que dos.
Cuélgala al cuello,
puedes tener una,
pues con la mano
es difícil servir lo caliente.

Te correría azúcar por los dedos
como el consuelo
como el deseo,
el día
que ella sea tuya.

Puedes poseer una cuchara,
una rosa,
tal vez un corazón
y una tumba
tal vez.

de Hilde Domin,
en https://elvendedordetierra.com/2018/05/28/poemas-de-hilde-domin/ (8/7/20).

No te acostumbres...

No te acostumbres
no debes acostumbrarte
una rosa es una rosa
pero un hogar
no es un hogar

de Hilde Domin,
en https://elpais.com/diario/2006/02/26/agenda/1140908403_850215.html (9/5/20).

martes, 7 de julio de 2020

Congreso Internacional del Miedo

Congreso Internacional del Miedo

Provisoriamente no cantaremos al amor,
que se refugió más abajo de los subterráneos.
Cantaremos al miedo, que esteriliza los abrazos,
no cantaremos al odio porque este no existe,
existe apenas el miedo, nuestro padre y nuestro compañero,
el miedo grande de los sertones, de los mares,
[de los desiertos,
el miedo de los soldados, el miedo de las madres, 
[el miedo de las iglesias,
cantaremos al miedo de los dictadores, 
[al miedo de los demócratas,
cantaremos al miedo a la muerte y al miedo 
[de después de la muerte,
después moriremos de miedo
y sobre nuestras tumbas nacerán
[flores amarillas y medrosas.

de Carlos Drummond de Andrade,
en 50 poemas escogidos, Fundación editorial el perro y la rana, 2008.

lunes, 6 de julio de 2020

El entierro de Pedro León Ugalde

El entierro de Pedro León Ugalde

Pedro León va recostado en la inmensa caja negra
—cuatro tablones de roble, cruzados por cuatro ausencias—;
un rumor de mar levanta toda la nación llorando
debajo del agua roja de los revolucionarios,
y a la orilla de las altas murallas del Cementerio,
como un capitán de sombras, presenta armas el invierno;
y aquel ademán romántico de gran raigambre española,
¿en dónde está el gran chambergo y la gran capa sonora?;
paso a paso, tranco a tranco, tranco a tranco, paso a paso
el cortejo avanza solo, como un toro degollado;
es el pueblo, todo el pueblo inocente y formidable,
el criollo, el triste, el pobre, el chegre rotito de antes,
más panudo que una res de rezago, en primavera,
ahora de duelo, echado, cargando un saco de penas,
detrás del recuerdo de ese que está tendido allá adentro,
con las dos manos cruzadas en los cien mundos del pecho;
entra Pedro León andando, muerto mandando y bramando,
con aquel bramido grande y mudo de los finados;
y cae en el ataúd la flor popular lo mismo
que una gran lluvia madura de corazones perdidos,
arrastrando en sus entrañas «la chusma» del Año Veinte;
pero un viento de comedia sopla la sombra y adviene
el sainete del pelele entre las tumbas soberbias,
y el garrote de la ley engrasado de vergüenza;
restalla la espada, empleándose en mitos de cobardía;
y los caballos se niegan a atacar la muerte misma;
Pedro León, ¿qué dice ahora tu amigo, el «León» del Gobierno?
(cerrados están los puños, porque están los puños muertos);
bajo una suerte de adioses, la eternidad enlutada,
se entreabre y avanza un hombre a las soledades máximas,
dejando a la autoridad clavada en su chisme, humano,
tal como a una arpía vieja y ciega, vociferando
frente a las masas obreras, grandiosas de comunismo
(palabrotas de matón nacional); enfurecido,
el «Senador de los Pobres» duerme para siempre y nunca;
pero, revólver en mano, se levanta su figura,
apuntando al corazón negro de la oligarquía,
y su proyectil eterno marca la casta asesina;
¡Pedro León, te escarnecieron, Pedro León, te pisotearon,
dispara, desde la muerte, contra los reaccionarios,
los fariseos vestidos de palomas, los verdugos,
comerciantes —asesinos de Satanás y los últimos
ejemplares— miserables del embaucador «patriota»,
los sicarios, los esbirros de la morralla católica,
dispara contra el fascismo y el imperialismo: el HAMBRE,
dispara contra la guerra burguesa, pavoneándose
sobre la masa y los gremios heroicos de proletarios,
dispara contra los ricos, dispara contra los amos,
por el «Frente Popular», Pedro León, desde la nada,
desde la sombra infinita del infinito, dispara ...!

de Pablo de Rokha,
en Poesía social y revolucionaria del siglo XX (selección de Jorge Brega), Editorial Agora, 2012.

domingo, 5 de julio de 2020

Kaïdara

Kaïdara

He comido pollo antes que el piojo me comiera.
Tira mi “comedor” a tierra.
Un día cercano, la tierra se lo comerá.
La vida así está hecha.
La termita roe las raíces, las come.
En cuanto a la gallina, se traga la termita.
El hombre se alimenta de la gallina
y la fiera se come al hombre.
La tierra paciente espera.
Sin ojos, contempla y ve.
Observa al escarabajo.
Se ríe de él, sin boca.
El escarabajo sin palabras le dice:
“¡Oh tierra!, yo imito a Gueno tu Creador,
que te da vueltas durante el día,
te da vueltas de nuevo por la noche,
te hace rodar en todos los sentidos
y te hace danzar en la eternidad”.
En verdad, la vida consiste en contemplarse.
Nosotros nos comemos, nos comemos de nuevo
y, finalmente, la tierra nos come a todos.

Anónimo (poema fulbe),
en Poesía anónima africana (Rogelio Martínez Furé Comp.), Fundación Editorial el perro y la rana, 2007.

sábado, 4 de julio de 2020

concierto de esperanza para la mano izquierda - GRAVE

concierto de esperanza para la mano izquierda

GRAVE

¡Cuántos niños han muerto
a la sombra de nuestras esperanzas!
Nosotros los mayores no merecemos perdón.
Utilizamos la ternura para infundir
y las escuelas matutinas para inculcar
las estatuas callejeras para infligir
y los discursos en la plaza para perpetrar
y los manuales y las prédicas y los
premios dominicales y los programas
infantiles en la televisión y luego
los dejamos morir traspasados por
las bayonetas. ¡Cuántos niños han muerto
a la sombra de nuestras esperanzas!
Nosotros los mayores somos inventores
del cariño y luego productores de la bayoneta.
Nosotros acariciamos la esperanza y luego
somos los impávidos verdugos de la esperanza.
Hemos inventado la ley y el cumplimiento
de la ley. Hemos creado la vida y decretado
la muerte. Somos los treinta dineros
de nuestras propias alegrías. Merecemos
tristeza, merecemos eternamente la esperanza.
Vivir la realidad y estrangular
los sueños. Ajusticiarlos a quemarropa.
Ponerles nuestros nombres y asesinarlos.
Nosotros los mayores que hemos perdido
el respeto al pasado y asesinamos el futuro.
Los que decimos: ¡son los hijos ajenos!
como si fueran ajenos nuestros hijos
como si fueran hijos del árbol o de las rocas
o del crepúsculo boreal como si fueran
hijos de la llama y del ornitorrinco
como si fueran hijos de otros sistemas
solares o patrias cósmicas ultravioletas
coma si nosotros las mayores no fuéramos
los padres de los hijos o si los hijos
de los mayores fueran los hijos de los menores.
Somos nosotros los culpables. Somos
los implacables destructores de nosotros mismos.
No merecemos perdón. Merecemos la esperanza
eternamente sumergidos en la esperanza.

de Pedro Mir,
en Viaje a la muchedumbre, Siglo XXI, 1978.

viernes, 3 de julio de 2020

concierto de esperanza para la mano izquierda - SOLO DE ESPERANZA

concierto de esperanza para la mano izquierda

SOLO DE ESPERANZA

La esperanza es un nido
y una semilla en el suelo.
La esperanza una flor
en forma de coliflor
que mastican lejanos
los camellos.
La esperanza es la raíz
en la humedad, y el arroyo
en el desierto.
El barco sobre la mar
y Federico en sus versos.
La esperanza es un concierto
popular
en los años duros
y en doscientos muertos.
El caballo en la montaña
y en Granada un monumento.
La esperanza es un cuartel
de policía consagrado
a cuidar la tranquilidad
del pensamiento
el orden del arcoíris
y la equidad del recuerdo.
La esperanza es la esperanza
convertida en ley
de los pueblos,
el pueblo convertido en ley
y la esperanza en Gobierno.
La esperanza es un Estado
de muchachas escribiendo
un plan quinquenal de niños
y una constitución del soneto.
La esperanza es contar con todo
lo que necesita el librero
y el obrero de obras públicas
para trazar un camino
que una a todos los pueblos
del mundo,
convierta a todas las patrias
en una sola patria,
reúna todos los brazos
en un solo trabajo
sideral y alegre,
lleve la flor y la coliflor
a los desiertos,
traiga invasiones de trigo
y de manzana a los centrales
azucareros.
Un río de lunas que gira
en el corazón del sistema
planetario y derrama
la médula del hombre
sobre la espuma del
firmamento.
La esperanza es la muerte
de lo que fuera antiguo
y ha sido eterno.
La esperanza es la muerte de la muerte.
La esperanza es la esperanza
de reanudar la juventud del pueblo.

de Pedro Mir,
en Viaje a la muchedumbre, Siglo XXI, 1978.

jueves, 2 de julio de 2020

libertad individual

libertad individual
(asamblea de palabras)

creo en la libertad individual
de las personas hasta sus últimas consecuencias
–mi primera novia
se enrolló con otro a mi lado–
creo en la libertad individual de las personas
hasta sus últimas consecuencias

de Francisco Cenamor,
en Asamblea de palabras, Ediciones Vitruvio, 2007.

miércoles, 1 de julio de 2020

La cosecha (III)

la cosecha

siembra reglas
y mañana cosecharás un mundo como el de hoy
siembra poesía
y mañana cosecharás un mundo mejor

Por Félix Sánchez Durán.

La edad de la inocencia

La edad de la inocencia

Mi perro, que apenas tiene un año,
acaba de romper las lilas
que planté esta mañana
y mueve la cola con euforia
cuando compruebo lo que hizo.

También yo, siendo pequeño,
rompía alegremente los juguetes
ante la desazón de mis progenitores.

A veces, me pregunto si Dios
no será un niño inocente todavía,
que, haciendo alarde de sus travesuras,
se pone a jugar con las estrellas.

De César Cantoni,
en Entre los Poetas Míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol.112, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2018.

martes, 30 de junio de 2020

Recuérdenme...

Recuérdenme...

Recuérdenme...
Que este inenarrable y luctuoso hecho - el gran crimen- no se cubra de olvido.

Llamaré, llamaré esta noche
a la puerta cerrada de vuestros ensueños,
para que despierten las conciencias ociosas
de su hondo letargo siquiera un momento.

¿No me conocen? ... Yo soy aquel niño hermoso
que exhausto y semidesnudo
en el desierto(1) de Der-El- Zor se durmió un día
y jamás despertó.
No se horroricen de mi esquelética figura,
nunca fui enterrado,
y así deambule
entre los muertos,
siempre con hambre y sediento.

Por la hambruna mi vientre se fue hinchando
como parte del tambor, tenso y delgado,
y mis piernas, descarnadas,
eran débiles palillos...
Incontables días sin bocado de pan.
mis ojos solo sangre y muerte vieron;
como una cabra sarnosa comí pasto,
y luego ... ni eso.

Los golpes no son lo grave, curar las heridas de la espalda;
tampoco importa el miedo a la muerte;
lo terrible es ver caer al suelo, hambrientos,
pequeños como yo...
No pido adornos ni abrigos de lana,
los esqueletos se ven siempre desnudos;
mas cuando saquen del horno los panecillos calientes,
acuérdense de mi.

A la puerta de todos los hombres,
llamaré, llamaré con insistencia,
para que nunca falte a ningún niño
su pedazo de pan cada jornada.

Mushegh Ishján,
en http://www.laizquierdadiario.com/Literatura-y-poesia-A-cien-anos-del-genocidio-armenio (30/5/20).
(1) "diserto", en el original

lunes, 29 de junio de 2020

Entrevista con el Secretario General

Entrevista con el Secretario General

para Julio Anguita, constructivamente

El secretario general del partido de la clase obrera
después de una serie de descalabros históricos
no directamente imputables a su gestión
sino más bien a las veleidades de la historia
que se empecina en avanzar por su lado peor
o más bien estancarse y chapotear en él

como decía, el secretario general del partido
es convocado por el diario más influyente de la prensa burguesa
para realizar una entrevista
y por supuesto acude
gracias a lo cual yo puedo leer sus declaraciones a la mañana siguiente.

Coincido con casi todos sus puntos de vista:
sobre la necesidad de la planificación democrática
sobre la voluntad de acabar con el capitalismo
en lugar de ponerle algunas cataplasmas socialdemócratas
en las que no creen ni los sedicentes socialdemócratas
sobre la bondad del pluripartidismo
y la perversidad de un partido único confundido con el estado
sobre la inseparabilidad de socialismo y libertad

Discrepo sólo de alguno de sus puntos de estilo:
un adjetivo chirría espantosamente
a lo largo de toda la entrevista.
El secretario general habla
de aspectos gloriosos
en la historia del movimiento comunista

y glorioso pertenece al vocabulario de los amos.

Hablan de gloria los tenientes coroneles
los obispos tonsurados
los presidentes de gobierno
los atletas líricos vencedores de todos los juegos florales.
Glorioso es una palabra
que no puede emplear un comunista.
¿No te parece?

Esta cuestión de estilo tiene tanta sustancia

que consigue amargarme la entrevista con el secretario general.

de Jorge Riechmann,
en El corte bajo la piel, Editorial Bitácora, 1994.

domingo, 28 de junio de 2020

LGBTIQ+

LGBTIQ+

tan arrogantes son
son tan arrogantes
que hasta cuando nos dicen
que no estamos enfermos
nos están jodiendo
se están metiendo
en nuestras vidas
en nuestros cuerpos

Por Félix Sánchez Durán.

sábado, 27 de junio de 2020

Realidades

Realidades

a la memoria de Matías Leonel Alderete
(al cumplirse el aniversario
de su asesinato en manos
de Fuerzas de Seguridad)

En algún lugar de nuestra patria
Una familia llora porque su hijo
No terminó la carrera que comenzó
Al salir de su escuela

En otro lugar de nuestra patria
Otra familia llora porque su hijo
No terminó la carrera que comenzó
Para llegar a su escuela

Por Félix Sánchez Durán.