Las palabras necesitan de un contexto histórico, político, social, cultural, económico y biográfico para significar. Exhorto a lxs lectorxs/militantes a realizar un viaje de conocimiento acerca de lugares, tiempos y autorxs para enriquecer la experiencia literaria que propongo en este espacio. Gracias.

sábado, 31 de octubre de 2020

Es inútil

Es inútil

Es inútil.
Inútil que a estas fechas
nos empiece a dar pena de la rosa y el pájaro,
inútil que encendamos velas por los pasillos,
inútil que nos prohíban nada,
no hablar por ejemplo,
comer carne,
beber libros,
bajarnos sin pagar en el tranvía,
querer a varios seres,
fumar yerbas,
decir verdades,
amar al enemigo,
inútil es que nos prohíban nada.

En los diarios vienen circulares,
papeles hay pegados en la esquina
que prohíben comer pájaros fritos;
¡y no prohíben comer hombres asados,
con dientes de metralla comer hombres desnudos!
¿Por qué prohíben pájaros los mismos que consienten
ejecutar el séptimo y el quinto mandamiento?

Tampoco han prohibido los niños en la guerra
y se los sigue el hombre comiendo en salsa blanca.
La “Protectora de Animales” está haciendo el ridículo.
Tampoco han prohibido comer las inocentes pescadillas,
los tiernos y purísimos corderos,
las melancólicas lubinas,
las perdices,
y qué me dices
de Mariquita Pérez
que la compran abrigos de seiscientas pesetas
habiendo tanta niña sin muñeca ni ropa,
los enfermos trabajan,
los ancianos ejercen,
el opio en tal café puede comprarse,
la juventud se vende,
todo esto está oficialmente permitido,
comprended y pensad nada se arregla con tener buenos
/sentimientos,
hay que tener arranque y ganas de gritar:

– Mientras haya guerras comeré pájaros fritos!

de Gloria Fuertes,
en Entre los Poetas Míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol.5, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2012.

viernes, 30 de octubre de 2020

PODEROSO SILENCIO

PODEROSO SILENCIO

Oh, cállate, Señor, calla tu boca
cerrada, no me digas tu palabra
de silencio; oh Señor, tu voz se abra,
estalle como un mar, como una roca

gigante. Ay, tu silencio vuelve loca
al alma: ella ve el mar, más nunca el abra
abierta; ve el cantil, y allí se labra
una espuma de fe que no se toca.

¡Poderoso silencio, poderoso
silencio! Sube el mar hasta ya ahogarnos
en su terrible estruendo silencioso.

¡Poderoso silencio con quien lucho
a voz en grito: ¡grita hasta arrancarnos
la lengua, mudo Dios al que yo escucho!

de Blas de Otero,
en Poesía Religiosa - Antología (Leopoldo de Luis), Alfaguara, 1969.

jueves, 29 de octubre de 2020

MADRE ANARQUÍA

MADRE ANARQUÍA

I

Porque tu amor ofendieron;
Porque tu albura mancharon
Los que no te conocieron.
Y porque te calumniaron,
¡Madre!
Porque estás en el martirio
y el adversario en acecho
Ha clavado en su delirio
Cien espadas en tu pecho.
¡Canto!
¡Canto, madre, tu amargura!
Yo soy tu poeta y canto.
¡El fuego de mi locura
Ha de abrillantar tu llanto!

II

Porque el montón de bribones,
Azuzados en la noche
Por impúdicos sayones,
Te ha arrojado su reproche.
¡Madre!
Porque ignara muchedumbre
De lacayos y rufianes
Pretende apagar la lumbre
Que emerge de tus volcanes.
¡Canto!
(¿Vejarte? ¡No! No pudieron
¡Ya lo sé! Mas te amargaron:
¡Ebrios te desconocieron
Y sicarios te insultaron!)

III

Porque tu hermoso camino
Hay quien quiere ensombrecer,
¡Cual si una fuerza, un destino
Se pudiera entorpecer!
¡Madre!
Porque, bárbaros, te niegan;
Porque, cobardes, te ofenden;
Claudicantes te reniegan
Y, torpes, no te comprenden.
¡Canto!
¡Canto, madre, tu amargura!

IV

Y canto por que estás triste,
Y canto por que estás sola
Y a tu alrededor subsiste
La violencia de la ola.
Ola de odio, ola inconsciente,
Ola impura, ola sin luz.
¡Ola igual a la demente
Que fué a quebrarse en la Cruz!
Fariseos de este instante,
Cristo no ha resucitado:
¡Cristo está siempre, triunfante,
En la cruz, crucificado!

de Alberto Ghiraldo,
en La Literatura Social en la Argentina (Álvaro Yunque), Editorial Claridad, 1941.

miércoles, 28 de octubre de 2020

frustrante

es frustrante
es muy frustrante
es extremadamente frustrante
haber corrido la roca más grande de tu camino
y no tener energía luego
para despejar
aquella insignificante

Por Félix Sánchez Durán.

martes, 27 de octubre de 2020

Clase media

Clase media

¡Oh, pobre clase media,
rémora de la causa de porvenir. En vano
eludes, inconsciente, tu rol en la tragedia
o te pones en contra del obrero, tu hermano,
para vivir lo mismo que un autómata: eres
un sancochado híbrido de hombres y mujeres.

Vegetando en la charca del convencionalismo,
no es menester siquiera consultarte: te das
incondicionalmente, alcahueta, lo mismo
que si te sofrenara la voz del atavismo,
haciéndote vivir para atrás.

de Federico Gutiérrez,
en Memorias y otras confidencias (Mariano Latorre), Editorial Andrés Bello, 1971.

lunes, 26 de octubre de 2020

MI ABUELA SE METÍA UNA PIEDRA EN LA BOCA...

MI ABUELA SE METÍA UNA PIEDRA
EN LA BOCA
y se ponía a leer en voz alta.
Te obligaba a imitarla
tardes enteras cuando la visitabas.
Para hablar correctamente decía.
Pronunciar bien cada palabra
mientras te miraba fijo a los ojos,
sin descanso.

de Ernesto González Barnert,
en Ningún hombre es una isla, Buenos Aires Poetry, 2019.

domingo, 25 de octubre de 2020

Despertar de octubre de 1917

Despertar de octubre de 1917

Redoblan los tambores de la sangre
Y el dolor de los tiempos se levanta con los puños erguidos
Toca a diana el clarín de los siglos
Sobre las tierras y los mares
Despertad proletarios sacudid las melenas de león
Como el ramaje iracundo de las olas
O como esa bandera que palpita en el cielo
Esa bandera color de corazón

Un mundo se derrumba y otro se yergue
Una procesión camina lenta hacia la muerte
Y otra marcha cantando hacia la vida
Una es el pasado que se esconde
La otra es la mañana que se despierta y que vibra
Como el ala del día

Los planetas renacen los ríos se detienen
Cambio toda mi vida por esa estrella nueva
Las flores dicen versos las colinas escuchan
Canto por vuestros puños los gritos de mi boca
Cambio vuestro sudor por mis palomas

Volved a las grutas funerarias
Enemigos del hombre y su destino
No queremos ver vuestros rostros de yeso
Ni oír vuestros pasos de lobo en el camino
Fantasma del pasado yo no fui tu pastor
Yo no aplaudí tus días ni conté tus diamantes
Yo no nutrí tus pájaros ni agrandé tus montañas

Cuida tus cabellos debajo de la tierra
Cuida tu carne que gusta a las raíces
Serás útil al fin en el silencio de la tumba
Tu sangre será savia
Tus brazos serán ramas
Y tus dedos perdidos serán frutas

Hombre eres hombre y no lo sabías
Tuya es la tierra y el cielo que dominas
Tuya la inmensa curva de los mares
Como es tuyo tu esfuerzo
Y el humo de tus fábricas escaleras del aire
Y el trigo de tus surcos amado por el viento

Hombre eres hombre y no lo sabías
Pero hoy los clarines rojos te lo dicen
Te lo gritan los árboles
Te lo cantan los mares
Despierta de tu sueño ya no eres más esclavo
Eres hombre sal de ti mismo sal de tus profundidades muéstrate al sol
Libera tus fuerzas despliega tus energías

Eres hombre eres hombre

De Vicente Huidobro,
en Poesía social y revolucionaria del siglo XX (selección de Jorge Brega), Editorial Agora, 2012.

sábado, 24 de octubre de 2020

Pidiendo la vida del tirano

Pidiendo la vida del tirano (1)

A Máximo Gorki.

Ni la piedad, ni el odio. Que la fiera,
para que triunfo la justicia, muera.—
Mas que, al partir, no manche los ideales
pasando por las manos del verdugo,
que no viva las muertes inmortales
guillotinada por un verso de Hugo,
que no acuse las cóleras sociales
pidiendo ante las puertas un mendrugo,
que no alcance el honor y la alta gloria
de las consagraciones de la Historia;
que muera en su maldad, no en su respiro,
que pierda con la zarpa su veneno,
que vea desde el fondo de un retiro
toda su fuerza convertida en freno,
todo su orgullo convertido en risa,
toda su pompa convertida en cieno;
pero que ante el futuro que se irisa
y alza en su cabalgata redentora
los estandartes nuevos que a la brisa
parecen hechos de un girón de aurora,
pueda medir la infamia de su anhelo,
pueda mirar la esplendidez plebeya,
¡y, roto, al fin, de su torpeza el velo,
ganado por la olímpica epopeya,
olvidado del trono y de su nombre,
el torvo emperador vuelva a ser hombre!

Y no es, Tirano, que la Musa olvide,
ni que un pasado augusto la intimide,
mas no nos enloquece tu corona,
que si tú eres la hoz, somos la espiga,
y que si el vil usurpador castiga,
la independencia popular, perdona.

Fija en la mente está como en los pechos
la lista funeral ,de tus cohechos...
En tu insensible corazón malvado
empieza la Siberia. Has desterrado
a todo un pueblo de la vida fuerte,
le has dado como cárcel un abismo
y has dejado caer sobre su muerte
la nieve inmaterial de tu mutismo;
innumerables multitudes gimen
heridas por las flechas de tu crimen;
montañas de cadáveres, calvarios
que parecen del odio las tribunas,
se elevan en los campos solitarios
bajo la mueca extraña de las lunas;
un hondo clamorear de imprecaciones
sube del lodazal de tus prisiones;
los cosacos que arrasan las ciudades
y destruyen aldeas y campañas
atraviesan las negras soledades
bañados por la luz de sus guadañas;
y no eres, alto emperador potente
que tocas las estrellas con el dedo,
más que la voz aguda y estridente
de un sentimiento deleznable: el miedo.

Mas el terror mortal que en la llanura
y en las ciudades y en los montes trepa
y da voz al sudario de blancura
que cubre a los que duermen en la estepa,
no alcanza a sofocar las energías
de los que piden libertad, a gritos,
y al margen de las viejas tiranías,
sin odio, sin pasión, sin cobardías,
viven en sus palacios de infinitos.

Tú mismo eres quien, César de alma vana,
preparas la apoteosis de mañana.
La sangre de los héroes que asesinas,
salpica los ojales de englantinas;
y cada luchador que cae vencido
es germen de fecundos luchadores,
como es el polen de la flor caído
nueva semilla de fragantes flores.

La victoria triunfal que ya fulgura
barrerá libremente del planeta
los andrajos de tu alma. En la más pura
redención de la raza antes sujeta,
se alzará por contraste a tanta gloria
el oprobio inmortal de tu memoria.
Y ante el pueblo grandioso, libre y fuerte,
será tu pena y tu mejor castigo
dejarte a solas dialogar contigo,
sepulturero de tu propia muerte.

Por eso es que en la aurora de las bellas
realizaciones que el destino graba
en la historia del hombre con estrellas,
debe alzarse una voz serena y alta:
—Dejad que caiga el peso de la falta
sobre esa pobre frente pensativa,
privadle si queréis de sus placeres,
despojadle de todos sus poderes,
hacedle labrador, pero ¡que viva!

de Manuel Ugarte,
en Poesías Completas, Casa Editorial Maucci, 1921.
(1) Estos versos, escritos cuando la revolución rusa era inminente,
fueron el último grito en favor de la vida del Zar, sacrificado
poco después en el remolino confuso de la lucha.—N. del A. (del original)

viernes, 23 de octubre de 2020

miedos humanos

miedos humanos
(asamblea de palabras)

no entiendo ser humano
golpe violencia y bomba
no entiendo el lamento
ingratitud patada y tumba

no no precario preso y extraño
presidio genocidio y moro
no entiendo cada arañazo
fusilamiento violación infarto

me siento tumbo me levanto
y siento miedo por ti
pequeño humano

de Francisco Cenamor,
en Asamblea de palabras, Ediciones Vitruvio, 2007.

jueves, 22 de octubre de 2020

Canción del levantado

Canción del levantado

No adoptes nunca el nombre que te dé la policía
No acerques tu caricia a la piel del invasor
No comas de su trigo, no bebas más su leche
No dejes que tu alberca la vuelvan lodazal

No esperes casi nada de su magistratura
No reces en su lengua, no bailes con sus ropas
No pierdas nunca el agua que duerme a los guardianes
Ni alojes en su boca la sal de tu estupor

No guardes en el sótano más bombas incendiarias
No firmes con tu letra los presagios del poder
No tiendas más cadáveres en la comisaría
No esperes nunca nada de la voz del ataúd

No entregues tu camisa a ninguno de sus bancos
Ni viertas en tu vientre el pozal de una bandera
No lleves a tu amigo a los pies del impostor
No dejes que su lengua fructifique tras tu casa

No permitas a tus hijos,
nunca dejes a tus hijos
esconderse en su jardín.

de Enrique Falcón,
en Entre los Poetas Míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol.31, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2013.

miércoles, 21 de octubre de 2020

Migración

Migración

Un niño sureño de color
viene a la escuela del norte
y tiene miedo de jugar
con los niños blancos.

Al principio son amables
pero luego se mofan de él
y le llaman “negro”.

Los niños de color también le odian,
después de un tiempo.

El pequeño es oscuro,
de cara redonda y negra
y lleva un cuello blanco bordado.

De este niño
pequeño y atemorizado
se podría escribir un cuento
prediciendo su mañana.

de Langston Hughes,
en Entre los Poetas Míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol.77, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2014.

martes, 20 de octubre de 2020

Breve Historia Universal del Sufragio

Breve Historia Universal del Sufragio

a lo largo de la Historia
hemos tenido que elegir
entre los leones y las hienas
siendo las presas heridas

Por Félix Sánchez Durán.

lunes, 19 de octubre de 2020

Historia Universal

Historia Universal

a la memoria de Osvaldo Bayer

los bronces
no enferman
con la lluvia

pero una vez que caen
les es más difícil
levantarse

de Félix Sánchez Durán,
en Somos, Ferrero/Hartmann, 2020.

domingo, 18 de octubre de 2020

LUCHO POR QUE CREO

LUCHO POR QUE CREO

A mis hijos

He venido de un no se dónde
del rincón vigente de los rebeldes
transitando la vida
con el ansia eterna
de atrapar al tiempo en su carrera...

Me alienta la esperanza
de alcanzar con los humildes
el futuro fruto del fusil y el sueño;
y en el sopor de mis cansancios
y mis deseos,
reflexiono un instante y manifiesto:
que se que pienso porque existo,
que se que lucho porque creo...,
y que creo en lo que sueño,
y que es mi sueño
el mejor mañana...;
pero cavilo sin prisa
y me sorprende
que es dicha certeza y más
lo que colma mi esperanza
en el todo pleno de las ilusiones
que tejen mis pensamientos:
existes tú como tierna concreción
de mi presente...,

compañero fiel de mi destino.

de Jesús Santrich,
en Versos Insurgentes - Poesía Guerrillera, 2007.

sábado, 17 de octubre de 2020

alineadas

alineadas

una hormiga tras otra
no hacen fila
construyen su historia

Por Félix Sánchez Durán.