Las palabras necesitan de un contexto histórico, político, social, cultural, económico y biográfico para significar. Exhorto a lxs lectorxs/militantes a realizar un viaje de conocimiento acerca de lugares, tiempos y autorxs para enriquecer la experiencia literaria que propongo en este espacio. Gracias.

martes, 26 de abril de 2022

HABLARÉ POR VOSOTROS

HABLARÉ POR VOSOTROS

Hablaré por vosotros.
Excavaré con mi palabra hasta encontraros
en las sangrantes raíces sumergidas
de vuestros corazones enterrados.
Hablaré por vosotros.
Reconstruiré la voz de vuestros labios,
su semilla final, la de aquel grito
constelado de estrellas y balazos.
Hablaré por vosotros.
Y extenderé el secreto que os dejaron
en la oquedad terrible de los ojos
la voz estremecida de los astros.
Hablaré por vosotros.
Jamás olvidaré aquellas madrugadas,
los últimos abrazos, las gargantas
de vuestra dignidad amordazadas.

de Marcos Ana,
en Contra - Poesía ante la represión, Coordinadora Anti-represión Región de Murcia, 2016.

lunes, 25 de abril de 2022

Aves de paso

Aves de paso

Sí. Eso somos
Pero nos hemos acostumbrado
a comportarnos como monumentos.
Y así nos va.
 
de Elvira Hernández,
en https://www.zendalibros.com/10-poemas-de-elvira-hernandez/ (28/3/2022).

domingo, 24 de abril de 2022

Desdelincuentización

Desdelincuentización

(Nota: El lector deberá leer esto con su mejor cara de árbol)

Nichos olvidados de la sociedad,
¡Desdelincuentícense!
Que las virtudes son serenas
Y eternas las cárceles
Omnipresentes las obsesiones
¡Ay, dolor! ¡Libertad que te desangras!

Destrastornemos tu alma
Pequeño protohumano
De mente atormentada
¡Desatornillemos los cuerpos calavéricos!
¡Apretemos los amortiguadores de la angustia!
Perseguí las tetas
Como dos postrecitos

ERES UN AGENTE SECRETO CONTRA LOS NAZIS
Una canción de tu infancia
La primera vez que hiciste el amor
.desesperación sin rumbo temblores pulso 9000 transpiración jadeos mirar para todos lados angustia deseo exasperado de que exista dios.
Paz. paz. paz. paz. paz.
¡Casi violencia de tanta paz!
Vodka de Chernobyl
...Sanación...
¿Sanación?

Sanación
Sí, sí. Sanación.
 
de Nahuel Maid,
en Poemas del patetismo inusitado 4315, Edición de autor, S/F.

sábado, 23 de abril de 2022

su abuelo ocultaba las palabras nuevas...

su abuelo ocultaba
las palabras nuevas
en un cajón del escritorio
de su despacho

ella sabía dónde buscarlas
y de pequeña se colaba
para probarlas
cuando su abuelo no estaba

sacaba de a una por vez
para que su abuelo
no lo notara

(23/abril - Día Mundial del Idioma Español)

Por Félix Sánchez Durán.

viernes, 22 de abril de 2022

NADIE SABÍA

  NADIE SABÍA

(22 de abril de 1870)

Era un día como tantos otros, natural y corriente,
envuelto en una bruma gris.
Severa sonaba la voz potente
del guardia en la esquina.
En la catedral, el arcipreste oficiaba
orgulloso del brillo del solideo.
Por la puerta de la taberna,
desde el amanecer, iban y venían los borrachos.
En el mercado se insultaban las vendedoras
zumbando como moscas en tomo a la miel,
y las burguesas se alborotaban, sin despegar la vista de las piezas de tela,
entre los puestos donde se vende el percal.
Un mujik miraba con muda tristeza
la puerta de una oficina
frente a un fragmento del “manifiesto”,
que amarilleaba sobre un tablero descolorido.
En la atalaya el bombero daba vueltas
como una fiera encadenada,
y los soldados, bajo una granizada de blasfemias,
cumplían órdenes a campo abierto.
Una hilera de carretas reptaba hacia el rio.
Los cargadores enharinados se desplazaban de un lado a otro.
Unos gendarmes conducían
bajo custodia a un estudiante andrajoso.
Un obrero con sus copas en el estómago
chillaba
“¡Pobre estudiante, que te vaya bien!”
... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ...
Nadie tenía idea, nadie
en toda Rusia, cargada con su cruz milenaria,
sabía que en un día tan corriente como ese
en Rusia... había nacido Lenin.

22 de abril de 1927

de Demián Biedni,
en Antología de la Poesía Soviética (Alexander Nakarov), Biblioteca Jucar, 1974.
Versión: Nicanor Parra.

jueves, 21 de abril de 2022

La pequeña Mirta desapareció

La pequeña Mirta desapareció

¿Cómo desapareciste, hijita?
Mirta… Mirta… Llené el mundo,
sembré el mundo con tu pequeño nombre.
Y no te encontraron.

¿Quién te arrebató, hijita?
¿Qué alas te alzaron desde la vida?
Interrogo a los caminos cada día.
«¿No oísteis quizás unos pasitos? Era muy liviana.»
Ellos se ahogan en polvo
y no responden.

¿Quiénes te arrebataron, hijita?
Si los cielos lo hicieron,
¿cómo pudieron hacerlo?
¿Cómo podían amarte
más que tu padre?

Interrogo a las brisas —a ellas que vienen de lejos,
de las tierras, de los mares.
«Eran unas palabritas que perfumaban a lilas,
¿no las oyó alguna de ustedes?»
Ellas gimen como pájaros golosos. Y se marchan.

¿Cómo desapareciste, hijita?
Pregunto a las hojas, las barcas, los vapores.
A los brotes que salieron de la nada. A las nubes.
«¿No visteis acaso una carita? Era muy pálida».
Y ellos callan.

¿Cómo desapareciste, hijita?
Mis ojos te habrían encontrado
aun sin luz.
Aun sin luz, mis dedos te habrían tocado.
Entonces, ¿cómo desapareciste?
¿Cuándo creció tanto el mundo
como para que pudieras desaparecer en él?

Yo te habría hallado.
Aunque fueras tan pequeña como una pelusita,
aunque fueras más liviana que una mariposa,
aunque fueras como la llamita de una vela,
yo te habría hallado, pequeña Mirta.

¿Por qué callas? ¿Por qué callas, hijita?
Si no puedes cantar,
si no puedes decir que me llamen,
entonces llora, hijita.
Y mis oídos te habrán de encontrar.
Aunque no vuelvan ya a escuchar jamás otra música,
ninguna otra música en el mundo.

de Menelaos Ludemis,
en Poesía social y revolucionaria del siglo XX (selección de Jorge Brega), Editorial Agora, 2012.

miércoles, 20 de abril de 2022

Informe

Informe

Se han estudiado todos los datos del problema.
Se han hecho mil diez fotos. Se han tomado medidas
del lugar del suceso y cuanto le rodea.
Se han aplicado al reo las técnicas modernas
sin peligro de vida, con médica asistencia.
Después, previo el permiso, se ha machacado el cráneo,
pues algo debe haber que sigue allí secreto.
No se ha encontrado nada que valiera la pena
para hacer racional el supuesto misterio
aunque se ha recurrido a lo pluscuamperfecto.
Pero no hay criminal que no acabe gritando.
Vamos a examinar a su madre y sus hijos
de un modo humanitario aséptico-anestésico.
Se trata de estudiar, porque es fundamental,
cómo pueden surgir monstruos tan disconformes
como este que estudiamos, no del todo anormal.
Hay que estudiar a fondo a su madre, y salvar
si es posible a sus hijos, operando en directo
esos tiernos cerebros, quizás aún corregibles.
Es una gran empresa super-occidental
que ejercemos en nombre de la Humanidad.

de Gabriel Celaya,
en Poesía social y revolucionaria del siglo XX (selección de Jorge Brega), Editorial Agora, 2012.

martes, 19 de abril de 2022

Nada ocurre dos veces

Nada ocurre dos veces

Nada ocurre dos veces
y nunca ocurrirá.
Nacimos sin experiencia,
moriremos sin rutina.

Aunque fuéramos los alumnos
más torpes en la escuela del mundo,
nunca más repasaremos
ningún verano o invierno.

Ningún día se repite,
no hay dos noches iguales,
dos besos que dieran lo mismo,
dos miradas en los mismos ojos.

Ayer alguien pronunciaba
tu nombre en mi presencia,
como si de repente cayera
una rosa por la ventana abierta.

Hoy, cuando estamos juntos,
vuelvo la cara hacia el muro.
¿Rosa? ¿Cómo es la rosa?
¿Es flor? ¿O tal vez piedra?

¿Y por qué tú, mala hora,
te enredas en un miedo inútil?
Eres, pues estás pasando,
pasarás —es bello esto.

Sonrientes, abrazados,
intentemos encontrarnos,
aunque seamos distintos
como dos gotas de agua.

de Wislawa Szymborska,
en https://culturainquieta.com/es/arte/literatura/item/17842-nunca-ocurre-dos-veces-un-poema-sobre-la-fugacidad-de-la-vida-de-wislawa-szymborska.html (27/2/22).

lunes, 18 de abril de 2022

GIRÓN DE BANDERA

GIRÓN DE BANDERA

¡Ah, cómo el alma de dolor se cierra
cuando le arrancas su ilusión dichosa!
Lástima que entre carne tan hermosa
ni una chispa de espíritu se encierra.

Turbios los ojos con el llanto siento,
¡ah! pero es fuerza que te diga adiós.
¡Adiós! La inmensidad del sentimiento
no se alimenta de materia, ¡no!

Y aunque mi vida de dolor estalla
viéndote nada más que una quimera,
te amo como al girón de la bandera
destrozada en el campo de batalla.

de Ricardo Gutiérrez,
en Poesías líricas, La cultura argentina, 1916.

domingo, 17 de abril de 2022

El corazón del poema

El corazón del poema

el uni-verso

De Roberto Jorge Santoro,
en Presentes, Ministerio de Educación, 2015.

sábado, 16 de abril de 2022

Empleado del mes (II)

Empleado del mes (II) 

Bajó
Higienizó sus manos
Ató su pelo
Se vistió
Limpió la copa con un trapo
Acomodó el mantel
Descendió los cuatro escalones
Atravesó el gran salón
Levantó un par de trípticos con canciones a su paso
Llegó al portón
Salió
Cerró con llave
Dejó un par de monedas a los mendigos de siempre
Y se marchó a su hogar
Sin distracción alguna

Mañana, hay que madrugar antes de la salida del sol

Por Félix Sánchez Durán.

NO ME BESES LAS MANOS

NO ME BESES LAS MANOS 

No me beses las manos, hermanita, estas manos 
pecadoras y sucias, 
han estado en contacto con miserias sin nombre 
y ya saben de todas las caricias impuras. 

Estas manos recogen el dinero del barro 
—¿y el dinero es la dicha?— 
hermanita ha de serlo porque en ti se convierte 
en tu pan, tu reposo, tu salud, tu alegría. 

Pero tú no comprendes el dolor que me agobia 
ni el horror que me inspiran estas manos impuras; 
hermanita, no quiero que las beses, no quiero 
ver que rozan tus labios, manos de prostituta.

de César Tiempo,
en Clara Beter - Versos de una..., Editorial Rescate, 1977.

viernes, 15 de abril de 2022

SEAMOS REALISTAS

SEAMOS REALISTAS

en este sitio
nadie cuenta
estrellas
por la noche.

de David González,
en El demonio te coma las orejas, Biblioteca Omegalfa, 2020.

LA VIRGINIDAD PRODUCE

LA VIRGINIDAD PRODUCE

cáncer,

vacúnate.

Son las primeras palabras que vas a leer
al entrar en la celda en la que vas a tirarte
los tres próximos días. El período,
como lo llaman aquí. Cinco palabras
dispuestas de esa forma, en ese orden concreto,
con la única intención de meterte el miedo
por el culo, acojonarte,
como si no lo estuvieras ya bastante.

Las han escrito en el tabique que separa
la taza del váter y el lavabo del resto de la celda.
La taza no tiene tapa. La cisterna no tiene
ni agua
ni cadena. El lavabo está sucio, y atascado,
y                     el resto de la celda, es precisamente eso:
resto, restos de la inmundicia
que te han dejado de recuerdo
otros que pasaron por aquí primero que tú:

mantas picajosas, llenas de pelos,
colillas,
periódicos atrasados

y                     revistas pornográficas,
con las páginas pegadas entre sí por escupitajos
amarillentos
de semen reseco,

y                      además, en las paredes, en el techo, en la puerta,
por todas partes, escritas con la llama del mechero
o con el mango afilado de una cuchara,
cantidad de frases:

Odio y muerte a los maderos.

Prohibido escupir en el suelo.

No llores por no ver el sol
pues tus lágrimas te impedirán ver las estrellas.(1)

La virginidad produce cáncer,

vacúnate.

Entonces te subes a la ventana (vete
acostumbrándote a llamarla por su nombre:
perlacha), te subes a la perlacha
y                      echas un vistazo al patio:

unos mendas disputan un partido de futbito;
otros dan vueltas, con las manos a la espalda,
como si todavía llevaran puestas las esposas;

otros están sentados, contándose milongas;
y                 hay uno que se apoya en la ventanilla del economato
y                             que va vestido con un traje de baño
de esos que imitan la piel de un leopardo.

La virginidad produce

cáncer,

vacúnate.

de David González,
en El demonio te coma las orejas, Biblioteca Omegalfa, 2020.
(1) Versos de Rabindranaz Tagore.

jueves, 14 de abril de 2022

Canto de esperanza

Canto de esperanza

Algún día los campos estarán siempre verdes
y la tierra será negra, dulce, y húmeda.
En ella crecerán altos nuestros hijos
y los hijos de nuestros hijos...

Y serán libres como los árboles del monte
y las aves.

Cada mañana se despertarán felices de poseer la vida
y sabrán que la tierra fue reconquistada para ellos.

Algún día...

Hoy aramos los campos resecos
Pero cada surco se moja con sangre.

de Daisy Zamora,
en Entre los Poetas Míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol.90, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2014.