Las palabras necesitan de un contexto histórico, político, social, cultural, económico y biográfico para significar. Exhorto a lxs lectorxs/militantes a realizar un viaje de conocimiento acerca de lugares, tiempos y autorxs para enriquecer la experiencia literaria que propongo en este espacio. Gracias.

martes, 15 de junio de 2021

EL JUEGO EN QUE ANDAMOS

EL JUEGO EN QUE ANDAMOS

Si me dieran a elegir, yo elegiría
esta salud de saber que estamos muy enfermos,
esta dicha de andar tan infelices.

Si me dieran a elegir, yo elegiría
esta inocencia de no ser un inocente,
esta pureza en que ando por impuro.

Si me dieran a elegir, yo elegiría
este amor con que odio,
esta esperanza que come panes desesperados.

Aquí pasa, señores,
que me juego la muerte.

de Juan Gelman,
en El juego en que andamos, Nueva Expresión, 1959.
Edición Digital: epublibre. Editor: Moro. 2014.

lunes, 14 de junio de 2021

Vía crucis

Vía crucis


de Cristina Peri Rossi,
en Condición de Mujer, Arquitrave Editores, 2005.

domingo, 13 de junio de 2021

Conversaciones con la alpargata - 19

19

Vos
no sos
gato
le digo.
Sos
alpargata,
algo
sin vida.
Medita.
¿Y vos?
me dice.

de Mauricio Rosencof,
en De puño y letra - Antología, Editorial Txalaparta, 1998. 

sábado, 12 de junio de 2021

UN REGALO

UN REGALO

La buena doña Rosa,
la menos lenguaraz de las vecinas,
la que tiene prestigios de buena y de piadosa;
para obsequiarla con alguna cosa,
hoy envió a mi madre dos yuntas de gallinas.

La excelente mujer
habrá creído hacer
una demostración de simpatía,
y adiestró sus plebeyas diplomacias...
—Mamá, es muy natural, le dio las gracias —
Y yo —¡naturalmente!— le diría:

Rechazo su regalo, doña Rosa,
a pesar del cariño que va en él:
de mi madre que es débil como una mariposa,
su maldito regalo hizo un monstruo cruel.
Usté tiñó de sangre sus bondadosas manos,
usté llenó la casa de gritos de dolor,
por usté se durmieron sus deseos cristianos
y dio la muerte a cuatro criaturas del Señor...

Y luego añadiría mi corazón poeta:
¡Y usté pudo haber puesto sus deseos mejores
en la cordialidad de una maceta
alborotada de sencillas flores!...

de Gustavo Riccio,
en http://literaturarioplatense.blogspot.com/2009/06/gustavo-angel-ricci-de-un-poeta-en-la.html (10/1/21).

viernes, 11 de junio de 2021

PROLETARIO

PROLETARIO


de Marciano Amboso,
en La Literatura Social en la Argentina (Álvaro Yunque), Editorial Claridad, 1941.

jueves, 10 de junio de 2021

VISIÓN

VISIÓN

Cae sobre la ciudad
la ceniza minúscula y tenue de la lluvia,
¡Qué grato es en un día como éste acariciar
un inocente sueño de ventura!

Mientras cae la lluvia, yo acaricio mi sueño:
Un día las mujeres serán todas hermanas;
la ramera, la púdica,
la aristócrata altiva y la humilde mucama.

Irían por las calles llevando como emblema
una sonrisa alegre y una mirada franca,
y así, sencillamente,
se ofrecerían a todos los hombres que pasaran.

Ellos se tornarían
tan buenos como el sol, como el pan, como el agua
su dicha cantarían todos los oprimidos
suavizadas sus manos, su gesto y sus palabras.

Bajo los cielos límpidos, banderas de alegría,
desplegados sus paños como alas
cual si quisieran cobijar a todas
las mujeres que un día supieron ser humanas.

(Sigue cayendo sobre la ciudad
la ceniza minúscula y tenue de la lluvia,
¡Qué grato es en un día como éste acariciar
un inocente sueño de ventura!)

de César Tiempo,
en Clara Beter - Versos de una..., Editorial Rescate, 1977.

miércoles, 9 de junio de 2021

TESTAMENTO DE PEPE DÍAZ, SOLDADO Nicaragua, 1934

TESTAMENTO DE PEPE DÍAZ, SOLDADO
Nicaragua, 1934

Por la manigua el aire derrotado,
los pájaros, sombreros, botas, miedos,
la muerte a pie, a caballo, esto se acaba,
salud por lo que fuimos, o mejor
salud lo que seremos
andan copas
de brindar por el tiro que te espera,
ten cuidado al morir
de no dejar caer un naipe, un guante,
un solo beso de mujer, la luna,
las hambres que pasaste, el agujero
donde fuiste a orinar, la dulce cama
de hacer un hijo a golpes de amor,
de no morirse así,
el general
Sandino está mirando por la tierra.
Toda su sangre mira por la tierra.
Y allí andaremos, pepe, recostados.
Nuestros hijos dirán que fuimos padres
de merecerlos, alzarán ardiendo
lo que seamos, pólvora o ceniza,
tendrán su primavera nicaragua,
libertad, paz, mantel, café, violetas,
y viviremos, pues, como te digo.
Allá, más adelante.
Porque hoy toca morir como varones.

de Juan Gelman,
en El juego en que andamos, Nueva Expresión, 1959.
Edición Digital: epublibre. Editor: Moro. 2014.

martes, 8 de junio de 2021

Evangélicas

Evangélicas

7.—El que llegó sin haberlo pretendido,
no es el hijo de sus propias obras.
8.—No todos los que se ufanan en las cumbres
subieron a ellas; muchos están allí, como
los yacimientos de ostras en lo más alto de
ciertas montañas, merced a cataclismos sociológicos:
también se puede rozar las nubes
con la frente por elevación inesperada del
suelo que se pisaba.
9.—No creas en la heroicidad de ningún
héroe, si no se despoja de su túnica y te
muestra las cicatrices.

de Almafuerte,
en Nuevas Poesías y Evangélicas, Claudio García Editor, 1918.

lunes, 7 de junio de 2021

A G. H. en nuestra cita

 A G. H. en nuestra cita

Extraño amigo mío...
Si pudiera llegarte como
ayer. Si asesinas serpientes
no hubieran alborotado todos los caminos, cavando tumbas para mis gentes y mi pueblo, sembrando muerte y fuego.
Si no hubiera regado la derrota la tierra de mi patria
con piedras vergonzosas, injuriantes. Si este corazón que tú conoces
fuera el mismo que ayer,
y no sangrase por la puñalada.

Si hoy, amigo mío, como ayer, pudiera envanecerme de mi gente, de mi casa y mi fuerza,
ya mismo me tendrías a tu lado.
Amarrando a las playas de tu amor el barco de mi vida.
Y seríamos igual que dos pichones.

De Fadwa Tuqan,
en Entre los Poetas Míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol. 35, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2013.

domingo, 6 de junio de 2021

sábado, 5 de junio de 2021

Bautismo

Bautismo


de Cristina Peri Rossi,
en Condición de Mujer, Arquitrave Editores, 2005.

viernes, 4 de junio de 2021

En una visión...

En una visión...

En una visión, Dios apareció al fanático del pueblo
y le reveló las letras V.R.A., que para él significaban:
¡Ve a rescatar almas!
Excitado, dirigió una incursión entre los idealistas
y acusó a los comunistas de faltar el respeto al águila americana.
¿Qué dijeron los acusados?:
—A mí V.R.A. me suena a Ve a Recoger Algodón
y recuerdo la vez en que el predicador
llegó a la casa del párroco
diciendo, «Anoche el Señor me dijo en el sueño
que tomara una bolsa de maíz de su pesebre».
«Pues el Señor debe haber cambiado de opinión»,
replicó el párroco mientras agarraba su rifle,
«porque esta mañana me dijo que no lo permitiera».

de Carl Rakosi,
en Poesía social y revolucionaria del siglo XX (selección de Jorge Brega), Editorial Agora, 2012.

jueves, 3 de junio de 2021

Auschwitz 2012

Auschwitz 2012

Cada día nos despojan de algo.
Nos quitan las casas que tenemos que seguir pagando,
nos quitan el trabajo sin derecho alguno,
nos recortan la sanidad para hacer aeropuertos sin aviones,
nos quitan maestros que nos enseñen a pensar
a exigir nuestros derechos,
nos quitan el derecho a protestar en las calles,
nos quitan a los jóvenes que han de buscarse el futuro lejos.
Lo siguiente será arrancarnos los brazos
porque saben que abrazarnos nos da fuerza.

de Begoña Abad,
en Contra - Poesía ante la represión, Coordinadora Anti Represión Región de Murcia, 2016.

miércoles, 2 de junio de 2021

Y yo siempre pensaba...

Y yo siempre pensaba: las palabras más sencillas
deben bastar. Cuando digo lo que es
debería destrozársele a cualquiera el corazón.
Que te hundes si no te defiendes
es algo que bien o mal comprenderás.

de Bertolt Brecht,
en https://periodicodepoesia.unam.mx/texto/ustedes-jovenes-de-los-tiempos-venideros/ (20/12/20).
Versión de Gerardo Piña

martes, 1 de junio de 2021

EMPRESA DE LAVADO

EMPRESA DE LAVADO

(Sobre una frase de Camus).

Aquí se lava todo, todo queda borrado,
la mancha y el zurcido, el crimen y el pecado.
Aquí se lava todo. Empresa de lavado
abierta el año 30 por un ajusticiado.

Era un hombre de pueblo, carpintero de oficio.
No llevaba corona, ni espada, ni cilicio.
A los hombres piadosos les sacaba de quicio.
Comía con los malos. No tenía otro vicio.

Predicó por los pueblos algo más de dos años.
Hablaba de la siembra, de pesca y de rebaños.
Curaba al paralítico que rondaba los baños;
echaba los demonios, veía sus engaños.

Era Dios en persona y murió como un hombre.
Se levantó de nuevo —que ninguno se asombre—
y a uno de sus amigos, Pedro de sobrenombre,
le encargó que lavara, que lavara en su nombre.

de Lorenzo Gomis,
en Poesía Religiosa - Antología (Leopoldo de Luis), Alfaguara, 1969.