Las palabras necesitan de un contexto histórico, político, social, cultural, económico y biográfico para significar. Exhorto a lxs lectorxs/militantes a realizar un viaje de conocimiento acerca de lugares, tiempos y autorxs para enriquecer la experiencia literaria que propongo en este espacio. Gracias.

martes, 8 de marzo de 2022

ATAVISMO

ATAVISMO   

Yo debo dar las gracias a mi raza judía 
que me ha hecho ahorrativa, 
mostrándome lejanos horizontes 
y adunando la prosa a la poesía. 

— El presente es la prosa 
y el sueño del mañana, poesía —. 

Hoy debemos sufrir — para nosotras 
esa es la ley suprema de la vida — 
pero el futuro puede ser en nuestras 
manos, dócil arcilla. 

Modelemos entonces las estatuas 
de nuestro porvenir, hermanas mías. 

de César Tiempo,
en Clara Beter - Versos de una..., Editorial Rescate, 1977.

lunes, 7 de marzo de 2022

Al pie de la diosa blanca

Al pie de la diosa blanca

Es cierto que te he traicionado.
Por años te pospuse con argumentos vanos.
¡Cómo desatendí tus llamados!
Quise taparme los oídos con la dorada
cera de las abejas, pero
no era de sirenas tu canto.
Hasta en sueños me perseguías
e hiciste yunque de mi pobre cabeza
y yo, necia, me negaba a obedecerte.
Pero prevaleciste, oh Diosa, sobre mí
y sobre la voluntad de quienes quisieron
encadenarme en el antiquísimo rol.
Tampoco puede decirse que fui cobarde
porque de algún modo supe resistir.
Te filtrabas, aliento que hinchó el alma.
He sobrevivido al menos, Diosa, y te hablo,
vencedora: soy tuya para siempre.

de Daisy Zamora,
en Entre los Poetas Míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol.90, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2014.

domingo, 6 de marzo de 2022

Consideración del poema

Consideración del poema

No rimaré la palabra sueño
con la inconveniente palabra empeño.
La rimaré con la palabra carne
o con cualquier otra, que todas me convienen.
Las palabras no nacen amarradas,
saltan, se besan, se disuelven,
en el cielo libre apenas un dibujo,
son auténticas, amplias, puras, insuperables.

Una piedra en medio del camino
o apenas una huella, no importa.
Estos poetas son míos. Con todo orgullo,
con toda precisión se incorporaron
a mi fatal lado izquierdo. Robo a Vinicius
su más límpida elegía. Bebo en Murilo.
Que Neruda me dé su corbata
llameante. Me pierdo en Apollinaire. Adiós, Maiakovski.
Todos son mis hermanos, no son periódicos
ni deslizar de lancha entre camelias:
es toda mi vida que aposté.

Estos poemas son míos. Es mi tierra
y es aún más que ella. Es cualquier hombre
al mediodía en cualquier plaza. Es la lámpara
en cualquier pensión, si todavía las hay.
—¿Hay muertos? ¿hay mercados? ¿hay dolencias?
Es todo mío. Ser explosivo, sin fronteras,
¿por qué falsa mezquindad me rasgaría?
Que se depositen los besos en la faz blanca, en las nacientes
[arrugas.
El beso es todavía una señal, aunque perdida,
de la ausencia de comercio,
boyando en tiempos sucios.

Poeta de lo finito y de la materia,
cantor sin piedad, sí, sin frágiles lágrimas,
boca tan seca, pero ardor tan casto.
Dar todo por la presencia de los lejanos,
sentir que hay ecos, pocos, pero cristal,
no roca apenas, peces circulando
bajo el navío que lleva este mensaje,
y aves de pico largo confiriendo
su derrota, y dos o tres faroles,
¡últimos! esperanza del mar negro.
Ese viaje es mortal, y comenzarlo.
Saber que hay todo. Y moverse en medio
de millones y millones de formas raras,
secretas, duras. Ése es mi canto.

Es tan bajo que ni siquiera lo escucha
el oído a ras del suelo. Pero es tan alto
que las piedras lo absorben. Está en la mesa
abierta en libros, cartas y remedios.
Se infiltró en la pared. El tranvía, la calle,
el uniforme del colegio se transforman,
son olas de cariño que te envuelven.

¿Cómo huir al mínimo objeto
o recusarse al grande? Los temas pasan,
yo sé que pasarán, mas tú resistes
y creces como fuego, como casa,
como rocío en los dedos,
en la hierba, que reposan.

Ahora ya te sigo a todas partes,
y te deseo y te pierdo, estoy completo,
me destino, me hago tan sublime,
tan natural y lleno de secretos,
tan firme, tan fiel... Como una lámina,
el pueblo, poema mío, te atraviesa.

de Carlos Drummond de Andrade,
en 50 poemas escogidos, Fundación editorial el perro y la rana, 2008.

sábado, 5 de marzo de 2022

Sagrados son los gusanos...

Sagrados son los gusanos
sagradas las bacterias

pues en ellas acaban resumiéndose todas las formas de vida
pues en ellas confluyen siempre las formas de vida más alta.

de Jorge Riechmann,
en El corte bajo la piel, Editorial Bitácora, 1994.

viernes, 4 de marzo de 2022

DEPÓSITO LEGAL

DEPÓSITO LEGAL

Me lo dijo mi madre.
A ella también se lo dijeron:

Escúcheme, señora, yo
lo único que puedo garantizarle
es que su hijo ha entrado
vivo
aquí.
Ahora bien,
lo que ya no sé,
lo que ya no puedo asegurarle
es cómo va a salir.

Se lo dijo
el director de la provincial.
Mientras se lo estaba diciendo,
fuera,
en el patio de la segunda galería,
estaban a punto
de bajarse al Rana.
El Rana, de rodillas,
atragantándose con sus propias lágrimas,
suplicando
por su vida:

¡Por favor, tío!
¡No me mates!
¡Por lo que más quieras!
¡No me mates!
¡Haré todo lo que tú me pidas!
¡De legal, tío! ¡Todo!
¡Te lo juro por mis hijos!
¡Por todos mis muertos!
¡Pero por favor!
¡Por favor te lo pido!
¡No me mates!

La primera mojada,
con un pincho sacado de la pata de una cama,
un conan,
le entró por la boca abierta,
le atravesó la lengua, la garganta
y                     salió por la espalda.
La segunda se la espetaron en la nuca.
Le rompió los dientes
y                     terminó de reventarle
la cabeza.

de David González,
en El demonio te coma las orejas, Biblioteca Omegalfa, 2020.

jueves, 3 de marzo de 2022

COMO TÚ...

COMO TÚ...

Así es mi vida,
piedra,
como tú; como tú,
piedra pequeña;
como tú,
piedra ligera;
como tú,
canto que ruedas
por las calzadas
y por las veredas;
como tú,
guijarro humilde de las carreteras;
como tú,
que en días de tormenta
te hundes
en el cieno de la tierra
y luego centelleas
bajo los cascos
y bajo las ruedas;
como tú, que no has servido
para ser ni piedra
de una Lonja,
ni piedra de una Audiencia,
ni piedra de un Palacio,
ni piedra de una Iglesia;
como tú,
piedra aventurera;
como tú,
que, tal vez, estás hecha
sólo para una honda,
piedra pequeña
y ligera...

de León Felipe,
en Antología Poética, Difusión Cultural. Universidad Nacional Autónoma de México, 1994 / Cuadernos de CAUM, 2018.

miércoles, 2 de marzo de 2022

Balada de las focas

Balada de las focas

Duerme papá foca como un lumpen
y mamá foca adora a su hijito:
como si fuera un caramelo,
lleva en sus dientes un pececito
a su foquita de ojos castaños
a la que llama "Mocosita".

¡Ah, focas semejantes a niños!
Podríais vivir en este mundo tranquilas,
pero en el programa comercial
ya hace mucho que fuisteis incluidas.
Y no saben las mamás focas
que hay cables telegráficos
volando de Moscú a nuestro barco.

Y que, ahora, en un lugar de Boston,
en una gran subasta de pieles,
hay un comerciante radiante
extendiendo cheques cordialmente
y exclamando: "¡Paz y amistad!
¡Paz y russian foca!"

Para que una dama
delgada como un palo
pueda envolver con pieles sus huesos,
alguien de rostro importante
por el morse nos envía
órdenes que se clavan en los sesos.

¡Ah, focas! Os amamos,
pero os golpeamos con porras
porque el país lo exige.
Os pegamos en los ojos con saña
porque sois divisas, oh focas,
y las divisas nos hacen falta.

Lloran y lloran las focas,
a sus hijos protegen bajo la panza,
pero no les podemos tener lástima.
Y otra vez les pegamos con las porras.
Lamiendo nuestras botas,
nos miran suplicantes los ojos de las focas.

Lloran y lloran las focas...
Si hiciéramos el mundo otra vez
(pero es, al parecer, algo imposible),
¡ah, cómo os amaríamos, focas!
No os pegaríamos nunca, focas.
Os invitaríamos a vodka
y jugaríamos al dominó con vosotras.

¡Todo ha ido bien! ¡Doblamos el plan!
Nos felicitarán en nuestro gremio.
¿Por qué estás triste como un arenque?
¡Con dinero no hay nunca tristeza!
Con tu sueldo te podrás comprar
el mejor de los televisores.
¡Que te levante el ánimo el partido
de fútbol que se juega hoy en Madrid!

Pero con pena amarga,
borracho, a tu mujer,
le alzas la mano, amenazándola,
y tus nervios no pueden ya aguantar...
Y tiemblas, porque sus ojos suplicantes
te miran como los ojos de una foca.

de Yevgueni Yevtushenko,
en Entre los Poetas Míos... - Colección Antológica de Poesía Social Vol.56, Biblioteca Virtual Omegalfa, 2013.
Versión de J. López Pacheco sobre traducción directa del ruso de Natalia Ivanova

martes, 1 de marzo de 2022

Opa

Opa

Si hoy te basta
con un BUENDIA
BUENDIA entonces
Compañero.

de Hugo Leyton,
en Escritos de la cárcel (la expresión poética de los presos políticos), Centro Integración Cultural, Vol.1, 1986.

lunes, 28 de febrero de 2022

ANTROPOLOGÍA DE ESTUDIANTES MÉDICOS

ANTROPOLOGÍA DE ESTUDIANTES MÉDICOS

Quien frustra la enfermedad
debe aprender a frotar la mitad de su cuerpo con aceite,
así ningún viento o ventisca
le molestará ni antes ni después.
El hombre también puede prevenir su final con régimen
dietético y la cultura entonces emergerá
tan pronto como el hombre empiece a usar purgas.

de Karl Marx,
en Cantos para Jenny y otros poemas, El Viejo Topo, 2000.

domingo, 27 de febrero de 2022

METAFÍSICA DE ESTUDIANTES MÉDICOS

METAFÍSICA DE ESTUDIANTES MÉDICOS

No ha existido nunca espíritu,
el buey vivió y jamás lo extrañó.
El alma es inútil fantasía,
y en el estómago no puede ser encontrada
y si alguien fuera capaz de hallarla en la tierra
entonces con una píldora podría ser liberada.
Entonces los espíritus serían vistos
emergiendo en un interminable fluir.

de Karl Marx,
en Cantos para Jenny y otros poemas, El Viejo Topo, 2000.

sábado, 26 de febrero de 2022

A LOS ESTUDIANTES MÉDICOS

A LOS ESTUDIANTES MÉDICOS

Malditos estudiantes médicos-filisteos,
todo el mundo es solo una bola de huesos para ustedes.
Cuando una vez enfriaron la sangre con hidrógeno,
y cuando sintieron el latir del pulso, entonces,
pensaron: «He hecho todo de lo que soy capaz.
El hombre podría estar muy confortable.
Qué astuto el Dios todopoderoso
tan bien versado en anatomía»
Las flores son todas instrumentos para usar,
cuando todas han sido hervidas en infusiones herbales.

de Karl Marx,
en Cantos para Jenny y otros poemas, El Viejo Topo, 2000.

viernes, 25 de febrero de 2022

LA PATRIA DEL ALMA

LA PATRIA DEL ALMA

¿Adonde estás escondida,
patria que en un sueño hallé?
¿Cuándo tocará mi pie
en tu arena bendecida?

¡Veinte años de marchar
desterrado y vagabundo !...
¡Te busco por todo el mundo
y no te puedo encontrar!

Este suelo es suelo extraño;
acaso perdí mi huella:
voy a preguntar por ella
al monte del ermitaño.

—¡En el nombre del Señor!...
—¡El te guarde, peregrino!
—¿Dónde lleva este camino?
—Al torrente bramador.

—¿Y sabes dónde hallaré
el rumbo que voy buscando?...
—¿A qué tierra vas viajando
para reposar tu pie?

—Busco la patria del alma,
del mundo grato solaz,
adonde se vive en paz,
adonde se muere en calma.

Donde no habita traición
y el hombre es del hombre hermano
donde no se alza la mano
para herir el corazón.

Allí, donde el alma ardiente
por los afanes postrada,
halle la dulce mirada
de una mujer inocente.

Donde logre reposar
el hombro sobre su seno,
sin que un trago de veneno
le alcance ella al despertar.

Donde se pueda verter
este raudal de cariño
que desde la edad de niño
luchando está por romper.

Allí, donde la esperanza
no es un sueño de mentira;
donde a los cielos se mira
y una promesa se alcanza.

Allí, en fin, donde al morir
este mísero gusano,
tocando una amiga mano
pueda al menos sonreír.

—¡Desdichado peregrino!
¿y dices que vagabundo
has cruzado todo el mundo
buscándola en tu camino?

—Era niño en la mañana
cuando de mi hogar salí;
y hoy... ¡miserable de mí,
traigo la cabeza cana!

Únicamente encontré
perfidia, traición y guerra
en cada palmo de tierra
donde ha tocado mi pie...

—Tienes la pupila abierta
y aún el cielo se te esconde...
mira, insensato, y responde:
¿has llamado a aquella puerta?

—Y esa puerta ¿dónde guía?
—Bajo tu paterno hogar...
—¡Ay! ayúdame a llamar...
¡madre mía!... ¡madre mía!...

—Esa es la patria del alma,
único y grato solaz;
¡sólo allí se vive en paz!
¡sólo allí se muere en calma!

de Ricardo Gutiérrez,
en Poesías líricas, La cultura argentina, 1916.

jueves, 24 de febrero de 2022

ALTA TRAICIÓN

ALTA TRAICIÓN

No amo mi patria.
Su fulgor abstracto
es inasible.
Pero (aunque suene mal)
daría la vida
por diez lugares suyos,
cierta gente,
puertos, bosques de pinos,
fortalezas,
una ciudad deshecha,
gris, monstruosa,
varias figuras de su historia,
montañas
-y tres o cuatro ríos.

de José Emilio Pacheco,
en Un pulso que golpea las tinieblas, Partido de la Revolución Democrática (PRD-DF)/Para Leer en Libertad A.C., 2012.

miércoles, 23 de febrero de 2022

BASURA

BASURA

«aburrido», dijo él desde el lecho de muerte, «aburro a todo el mundo, incluso a mí.

lo desperdicié todo, era un farsante, un palabrero… demasiada imaginación… demasiados trucos».


«ah, Maestro», dijo el joven poeta, «eso no es verdad, de ningún modo».

«es totalmente cierto», dijo el anciano.

«mi obra fue una basura

pretenciosa».


el joven poeta no se creyó aquellas palabras.

no podía ni debía creerlas, porque él escribía también basura.


aun así le preguntó al anciano: «pero, Maestro, ¿qué hay que hacer?».

«empezar por el principio», le contestó el anciano.

pasados unos días murió.

no había querido ver al

joven poeta de ninguna manera.


ahora eso ya tampoco importaba.

de Charles Bukowski,
en El padecimiento continuo, Colección Visor de Poesía, 2011.
Trad. de Silvia Barbero

martes, 22 de febrero de 2022

¡QUÉ LÁSTIMA!

¡QUÉ LÁSTIMA!



de León Felipe,
en Antología Poética, Difusión Cultural. Universidad Nacional Autónoma de México, 1994 / Cuadernos de CAUM, 2018.