Las palabras necesitan de un contexto histórico, político, social, cultural, económico y biográfico para significar. Exhorto a lxs lectorxs/militantes a realizar un viaje de conocimiento acerca de lugares, tiempos y autorxs para enriquecer la experiencia literaria que propongo en este espacio. Gracias.

viernes, 21 de abril de 2023

OH PADRE QUE CONSERVAS UNA GOTA DE INCERTIDUMBRE EN LOS OJOS

OH PADRE QUE CONSERVAS UNA GOTA
DE INCERTIDUMBRE EN LOS OJOS

estaba soñando con la falsificación, cuando
algo me arrancó del dormir para anotar esto:

Mi padre me enseñó que ha de madrugar mucho quien desea
subir a lo alto de la montaña.

Me enseñó que se puede adulterar una vida como quien
falsifica un alimento.

Él me enseñó a cuidar mi calzado, protegerlo con grasa y
untos impermeabilizantes, guardarlo relleno de hojas de
papel prensado para que la humedad y la fosforescencia no
lo deformasen.

Mi padre me enseñó que la flor puede contemplarse tanto
con ojos de insecto como de entomólogo, y que no existe
una razón última para privilegiar una de ambas perspectivas.

Me mostró la luz tamizada del bosque de hayas, de manera
que cuando, muchos años después, quisieron darme gato por
liebre, contesté: estos gatos que no son liebres tampoco son
hayas.

Me enseñó a distinguir algunos frutos del bosque, pero no
quiso o no supo ahondar en la doctrina de los venenos.

Una vez me mostró la extrema vulnerabilidad de su
juventud, pero se retractó pronto.

Quiso alertarme sobre los hirsutos delirios que descansan en
muchas habitaciones de la Casa de la Conciencia.

Me llevó cerca del taller del herrero donde se rectifican los
sueños de las imágenes. Y entonces me enseñó que no vale
la pena sacrificar la vida por un efecto retórico.

Me hizo ver que no hay huerta sin áspid ni inteligencia sin
vasos comunicantes.

Me acostumbró a caminar con una mochila bien cargada;
pero sin eso ¿cómo hubiera podido vaciar la mochila?

Me mostró un lugar vacío. La limpieza y la resonancia de un
lugar vacío.

Me enseñó la magia de la Cámara Oscura, y el sustantivo
revelador que luego se fue perfumando de infinito.

Me insinuó –¿o son figuraciones mías?– que el drama del
Rey, la Reina y el Príncipe es en verdad mortífero, pero que
se pueden buscar preguntas que nos sitúen en otro lugar.

Se las arregló para sugerirme que no es imprescindible
repetir los crímenes de los padres.

Mi padre me enseña que tenemos que inventar a ese padre
con dolor y sin ferocidad, un padre que nos invente.

de Jorge Riechmann,
en Once poetas críticos en la poesía española reciente (Enrique Falcón, coord.), Baile del sol, 2007.

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