Las palabras necesitan de un contexto histórico, político, social, cultural, económico y biográfico para significar. Exhorto a lxs lectorxs/militantes a realizar un viaje de conocimiento acerca de lugares, tiempos y autorxs para enriquecer la experiencia literaria que propongo en este espacio. Gracias.

miércoles, 29 de septiembre de 2021

Proverbios y cantares - VIII

Proverbios y cantares - VIII

En preguntar lo que sabes
el tiempo no has de perder...
Y a preguntas sin respuesta,
¿quién te podrá responder?

de Antonio Machado,
en Proverbios y cantares, Biblioteca Virtual Universal / Editorial del cardo, 2010.

martes, 28 de septiembre de 2021

LOGOS

LOGOS

De todo se ha aprendido la medida.

Un poquito y no más. No demasiado.

No nada: lo medido
lo suficiente
el necesario y breve placer. La necesaria
justa alegría. No la devorante
alegría de ser, sino la tenue
alegría de estar así o de otra
manera: lo “agradable”.

El necesario
justo dolor

(la justa indignación, —no demasiada—
y una tristeza desteñida
—chirle—
para que se humedezca
(sin empapar, cuidado!)
la trama de los días.

de Circe Maia,
en Cambios, permanencias, Ediciones Siete Poetas Hispanoamericanos, 1978.

lunes, 27 de septiembre de 2021

POR UN PLATO DE LENTEJAS

POR UN PLATO DE LENTEJAS

Puedo estar en minoría
encontrarme tras las rejas;
más no vendo mis principios
por un plato de lentejas.

Hablo claro sin tapujos
no concilio con traidores;
antes me corto la lengua
de un solo tajo traidores.

Que me llamen los “maduros”
de ultraizquierda o infantil;
eso no me preocupa
yo me siento juvenil.

Juvenil en mis ideas
y en mis ansias juvenil; 
juvenil ahora y siempre
con la pluma y el fusil.

Allá aquellos mercachifles
prostitutas sin honor;
la desnudan su conCIENcia
por un mísero favor.

Yo no puedo hacer lo mismo
me lo impide la razón;
antes muero en digna hambruna
que acallar mi corazón.

Puedo estar en minoría
encontrarme tras las rejas;
más no vendo mis principios
por un plato de lentejas.

de Jovaldo,
en Poemas y Canciones de Lucha, Ediciones Vanguardia Proletaria, 2011.

domingo, 26 de septiembre de 2021

Y si te atara las manos a la espalda...

Y si te atara las manos a la espalda
y te pusiera una venda en los ojos
y te hundiera la cabeza en el agua
y te colgara de los brazos
y te dejara el cuerpo violeta
y te tirara desnudo sobre el piso
y te pateara y te insultara
y te matara
   Entonces yo sería tú
Y no quiero.

de Jorge Freccero,
en Escritos de la cárcel (la expresión poética de los presos políticos), Centro Integración Cultural, Vol.1, 1986.

sábado, 25 de septiembre de 2021

Flor nocturna

Flor nocturna

Se durmió sin pensarlo el angelito,
Su pecho late apenas,
El mármol del palacio es duro y frío;
¿Son siempre así las gradas de las puertas?...

Su rostro amoratado con el tinte
De cárdenas violetas
Que estuviesen muriendo en su semblante
Como en límpida copa de azucena.

Abierto el pecho al vendaval helado,
Desnuda la cabeza:
Allá en el infinito muchos astros,
Muchos ángeles tristes en la tierra.

Tiene mal de cariño y se acurruca
En su propia miseria,
Como las flores que al llegar la noche
Sobre su mismo cáliz se repliegan.

Y mientras cruza sollozante el viento
Lloran quizá, o sueñan;
Llorar... soñar... ¿quién sabe la rapsodia
De ese llanto precoz cuajado en perlas?

Sin padre ha tiempo lo dejó el destino,
Flor en capullo seca;
Tiene madre, mas, ¡ay! tanto ha llorado
Que anegada en el llanto quedó ciega.

Dicen que era más linda que una rosa
Cuando en abril revienta,
Y eclipsaron las nubes sus miradas
Como eclipsan también a las estrellas.

Y aquel niño es la vida de su vida,
A él sus lágrimas llegan,
Y las enjuga con sus mismos labios
Con tantos besos como el pobre deja.

Y el rapaz inocente se ha dormido
De un palacio en la puerta;
¡Cuánto calor de alfombras hay adentro,
Cuántas frígidas ráfagas afuera!...

El gorrión acurrucase en su nido
Y entre chirridos sueña;
Y hay ángeles tendidos en los diarios
Que vender no pudieron en la brega.

Habla... llora... delira ¿qué le pasa?...
Parece que ahora sueña:
"Mamá... mamá... no llores madre mía,
¿Ha mucho que me lloras y me esperas?

"Ya he vendido bastantes, madre mía,
Ya muy pocos me quedan,
No faltará para comer mañana;
En ti pienso, mamá, por Dios, no temas."

Y sus palabras al brotar trementes
En su boca se hielan
Como caireles de virgínea escarcha
Que de sus labios oscilantes cuelgan.

¡Qué triste el mundo, oh Dios!, cuando del teatro
Los millonarios vuelvan
Acaso digan empujando al chico:
"¿Qué haces aquí, pillete?, no te duermas."

¡Oh, qué páramo el mundo... qué perverso!
Qué triste la pobreza
Cuando hay hombres que duermen entre plumas
Y niños que se duermen en su puerta.

De Alfonso Durán,
en Flores de un Otoño, Antonio Molinari Casa Editora, 1922.

viernes, 24 de septiembre de 2021

Canto a las madres de los milicianos muertos

Canto a las madres de los milicianos muertos

No han muerto! Están en medio
de la pólvora,
de pie, como mechas ardiendo.
Sus sombras puras se han unido
en la pradera de color de cobre
como una cortina de viento blindado,
como una barrera de color de furia,
como el mismo invisible pecho del cielo.

Madres! Ellos están de pie en el trigo,
altos como el profundo mediodía,
dominando las grandes llanuras!
Son una campanada de voz negra
que a través de los cuerpos de acero asesinado
repica la victoria.
Hermanas como el polvo
caído, corazones
quebrantados,
tened fe en vuestros muertos!
No sólo son raíces
bajo las piedras teñidas de sangre,
no sólo sus pobres huesos derribados
definitivamente trabajan en la tierra,
sino que aun sus bocas muerden pólvora seca
y atacan como océanos de hierro, y aun
sus puños levantados contradicen la muerte.
Porque de tantos cuerpos una vida invisible
se levanta. Madres, banderas, hijos!
Un solo cuerpo vivo como la vida:
un rostro de ojos rotos vigila las tinieblas
con una espada llena de esperanzas terrestres!

Dejad
vuestros mantos de luto, juntad todas
vuestras lágrimas hasta hacerlas metales:
que allí golpeamos de día y de noche,
allí pateamos de día y de noche,
allí escupimos de día y de noche
hasta que caigan las puertas del odio!
Yo no me olvido de vuestras desgracias, conozco
vuestros hijos
y si estoy orgulloso de sus muertes,
estoy también orgulloso de sus vidas.
Sus risas
relampagueaban en los sordos talleres,
sus pasos en el Metro
sonaban a mi lado cada día, y junto
a las naranjas de Levante, a las redes del Sur, junto
a la tinta de las imprentas, sobre el cemento de las arquitecturas
he visto llamear sus corazones de fuego y energías.

Y como en vuestros corazones, madres,
hay en mi corazón tanto luto y tanta muerte
que parece una selva
mojada por la sangre que mató sus sonrisas,
y entran en él las rabiosas nieblas del desvelo
con la desgarradora soledad de los días.

Pero
más que la maldición a las hienas sedientas, al estertor bestial
que aúlla desde el África sus patentes inmundas,
más que la cólera, más que el desprecio, más que el llanto,
madres atravesadas por la angustia y la muerte,
mirad el corazón del noble día que nace,
y sabed que vuestros muertos sonríen desde la tierra
levantando los puños sobre el trigo.

(España, 1936).

de Pablo Neruda,
en Poesía social y revolucionaria del siglo XX (selección de Jorge Brega), Editorial Agora, 2012.

jueves, 23 de septiembre de 2021

Los pájaros ciegos

Los pájaros ciegos
(Poema 3)

Fue una tarde, en octubre.

La primavera entonces lucía entre los árboles
sus primeros fulgores.

Los gorriones, tan díscolos, llegaban a la fuente,
se mojaban el pico, sacudían las alas
y luego recortaban el aire con su vuelo.

El cielo estaba azul sobre la plaza,
se paseaba, inocente, en los canteros
y soñaba después entre las hojas.

Alguien gritó
¡viva la libertad!

Junto a un charco de sangre estaba yo,
Juan Pérez, asturiano, profesión panadero,
veinte años de Argentina, con tres hijos,
un río de esperanza entre mis manos,
el corazón del mundo en mi garganta
y una copla en mi pecho.

La primavera, ciega, se amontonó en mi sangre.
Desde entonces mi copla perdura entre los pájaros.

de José Portogalo,
en Poesía social y revolucionaria del siglo XX (selección de Jorge Brega), Editorial Agora, 2012.

miércoles, 22 de septiembre de 2021

Proverbios y cantares - IV

Proverbios y cantares - IV

Nuestras horas son minutos
cuando esperamos saber,
y siglos cuando sabemos
lo que se puede aprender.

de Antonio Machado,
en Proverbios y cantares, Biblioteca Virtual Universal / Editorial del cardo, 2010.

martes, 21 de septiembre de 2021

CANCION DE PAZ

CANCION DE PAZ

Duermen los niños en sus cunas,
Las buenas madres velando están,
¡Duermen los niños! ¡Juegan los niños!
Esa es la paz.

Cantan los niños en la escuela,
Vuela en los aires coro jovial.
¡Cantan los niños! ¡Juegan los niños!
Esa es la paz.

A la distancia en la llanura
Se eleva el humo del dulce hogar,
Vuelan en torno las golondrinas:
Esa es la paz.

En los jardines florecidos
Desgrana perlas el fontanal.
Hay un idilio junto a la fuente:
Esa es la paz.

Diez mil navíos en las dársenas.
Diez mil navíos van a zarpar.
Por el mar vienen diez mil navíos:
Esa es la paz.

Por los senderos en tumulto
Los campesinos vienen y van;
Pasan cantando los campesinos:
Esa es la paz.

Vibra la vida en las metrópolis.
Destruye y crea sin descansar.
¡Vibra la vida! ¡Triunfa la vida!
Esa es la paz.

Y en las aldeas y ciudades
Y en las montañas y en las campañas
Ninguno falta. todos están:
Están los viejos y están los jóvenes.
¡Están los hijos y están las madres!
Esa es la paz.

de Mario Bravo,
en Versos para niños, Editorial Claridad, 1936 (?).

lunes, 20 de septiembre de 2021

lo tiraron a la calle

lo tiraron a la calle
la novia y el novio
así lo quisieron
era su gran día
eligieron cuándo
eligieron dónde
eligieron cómo
sería ese sábado
sería esa parroquia
sería de etiqueta
el triste hombre
de pelo largo
y torso desnudo
fue echado
con cruz y todo

Por Félix Sánchez Durán.

domingo, 19 de septiembre de 2021

AL CRISTO EXPUESTO EN UNA FIESTA DE BODAS

AL CRISTO EXPUESTO EN UNA FIESTA DE BODAS

Ah, Señor Jesucristo,
que en esa cruz de bronce cincelado
eres un pobre cristo
caricaturizado;
te compadezco, oh redentor:
te han condenado
a un suplicio mayor.

En nombre tuyo un hombre
que no sabe de amor, a los esposos
les hablará de amor: ¡y eso en tu nombre!
Y tus santas y líricas verdades
se estrellarán en esos corazones rocosos
y en tanta vanidad de vanidades...

Y cuando ya no bullan en la boca del fraile
las burbujitas del latín,
presenciarás algo peor al fin:
un baile, oh Cristo, un baile...

Frente a tu imagen dolorida,
las mujeres de trajes escotados
frotarán su lujuria contenida
contra los pantalones estirados.
Otras, se excitarán por los rincones...
Sus instintos despiertos
por la cosquilla lúbrica de las conversaciones,
se olvidarán que sufres con los brazos abiertos
la más abominable de las crucifixiones.

Y cuando terminados ya baile y ceremonia
se marchen y te olviden clavado en tu patíbulo,
ellas van a mojarse con agua de Colonia
y ellos, a sosegarse en un prostíbulo...

Quedarás solo. Y cuando
se hayan marchado todos, frente a tu imagen yo
en tu dolor, oh Cristo, me quedaré pensando,
y en tu madre y ¡la pobre madre que me parió!

Pues, oh Maestro, ya lo has visto:
se parecen tu madre con la mía;
porque es tan doloroso parir a un hijo Cristo
como parirle ungido en poesía...

de Gustavo Riccio,
en http://literaturarioplatense.blogspot.com/2009/06/gustavo-angel-ricci-de-un-poeta-en-la.html (10/1/21).

sábado, 18 de septiembre de 2021

¡Aquí van!...

¡Aquí van!...

Aquí van... son un salterio
De vibraciones vividas;
De flores estremecidas
En cuna y en cementerio.

Son dolor y son pasiones,
Ansia férvida de alturas,
Y grietas de sepulturas
Y escombros de corazones.

Un ave que a veces canta
Y al cantar cierra los ojos,
Porque un puñado de abrojos
Se entreanuda en su garganta.

Lamentos que son protesta;
Que gimen, gritan e imploran
Al sentir que muchos lloran
Y que nadie les contesta.

Alientos, luchas, pendones.
Ecos de clarín remotos,
Espadas y escudos rotos,
Banderas hechas girones.

Astros que no tienen cielo
Como fondo a su existencia;
Flores cargadas de esencia
Que agonizan entre el hielo.

Aljófares que caen suaves
En la esmeralda de fronda,
Como gemas de Golconda
Salpicando plumas de aves.

Y mucho cariño hermano,
Y mucho de unción divina
Y mucha patria argentina
Y mucho amor de cristiano.

De Alfonso Durán,
en Flores de un Otoño, Antonio Molinari Casa Editora, 1922.

viernes, 17 de septiembre de 2021

A MAIAKOYSKI

 A MAIAKOYSKI

Con fuego y humo en la cara
como un arcángel de paso
firme sobre las techumbres,
¡salud, Vladímir hermano!

Eres caballo y jinete,
aire suave y viento airado...
“Pesada carga la gloria”
...y escupes luego en tu mano.

Cantor de hazañas del pueblo,
orgulloso y desastrado,
te canto a ti, que pusiste
sobre el diamante el peñasco.

¡Salud, tormenta de piedra!
... Y, con un disimulado
bostezo, vuelves al vuelo
de arcángel de firme paso.

18 de septiembre de 1921

de Marina Tsevetáeva,
en Antología de la Poesía Soviética (Alexander Nakarov), Biblioteca Jucar, 1974.
Versión: Carlos Álvarez.

jueves, 16 de septiembre de 2021

EPÍSTOLA A LOS POETAS QUE VENDRÁN

EPÍSTOLA A LOS POETAS
QUE VENDRÁN

TAL vez mañana los poetas pregunten
por qué no celebramos la gracia de las muchachas;
tal vez mañana los poetas pregunten
por qué nuestros poemas
eran largas avenidas
por donde venía la ardiente cólera.

Yo respondo:
por todas partes oíamos el llanto,
por todas partes nos sitiaba un muro de olas negras.
¿Iba a ser la Poesía
una solitaria columna de rocío?
Tenía que ser un relámpago perpetuo.

Mientras alguien padezca,
la rosa no podrá ser bella;
mientras alguien mire al pan con envidia,
el trigo no podrá dormir;
mientras llueva sobre el pecho de los mendigos,
mi corazón no sonreirá.

Matad la tristeza, poetas.
Matemos a la tristeza con un palo.
No digáis el romance de los lirios.
Hay cosas más altas
que llorar amores perdidos:
el rumor de un pueblo que despierta
¡es más bello que el rocío!
El metal resplandeciente de su cólera
¡es más bello que la espuma!
Un Hombre Libre
¡es más puro que el diamante!

El poeta libertará al fuego
de su cárcel de ceniza.
El poeta encenderá la hoguera
donde se queme este mundo sombrío.

de Manuel Scorza,
en Las imprecaciones, Imprenta Juan Pablos, 1955.
Digitalizado por ínFimo.

miércoles, 15 de septiembre de 2021

Somos...

Somos
como una piedra que patean que patean

salvo que:
si en vez de arena, piedra
si en vez de arena, piedra
piedra roca mineral pulido

se romperá el pie en mil pedazos.

de Lucía Fabbri,
en Escritos de la cárcel (la expresión poética de los presos políticos), Centro Integración Cultural, Vol.1, 1986.