PATRIA MÍA
Las palabras suelen ser engañosas,
nos traicionan
cuando menos lo pensamos.
La palabra Patria, por ejemplo,
es bonita y embaucadora
y por este motivo
no se debe usar
a menos
que estemos seguros de ella.
La patria es como una madre
de leche.
También hay patrias
de muchos padres.
Éstas son, por naturaleza,
derrochadoras,
patrias que Dios y el dinero
han fundado,
las que andan por el mundo
en plan matamoros
atropellando
el nombre
y robando el trigo
de los demás.
Yo tengo una patria
que está por hacer
con lo mejorcito.
Esta patria no será
una categoría histórica.
Nacerá de la suma
de todas las letras
y de todos los corazones.
… Patria mía que estás naciendo
no me dejan pronunciar
tu nombre.
Abril 1996
de Manuel Pérez Martínez (Arenas),
en Libertad, no escribiré tu nombre en vano, Edición de autor, 2016.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario