La cosecha (II)
Me viste caer por la cuesta
Y no tomaste mi mano.
Me oíste gritarte ¡Hermano!
Y seguiste sentado
Mirando el azul del cielo.
Ahora que te estoy llevando
Al punto más alto
De esta montaña
Y planeo arrojarte
Contra las piedras
Me preguntás,
Estupefacto,
Qué me hiciste,
Cuál tu afrenta.
¿¡Es que acaso fuiste capaz
De hacerme tanto mal
Y no haberte dado cuenta!?
Tal vez, eso sea
Lo que más
Me molesta.
Por Félix Sánchez Durán
No hay comentarios.:
Publicar un comentario