MOTIVOS GALANTES
Y RESPONDIÓ LA LUNA
El jardín exquisito y pagano,
cobijó tu graciosa silueta;
el ocaso, doliente y lejano,
te enmarcaba en su cromo violeta.
El otoño amarillo, tu hermano,
te rezaba una loa secreta…
Te acogiste, temblando, a mi mano,
y a la luna mirabas, inquieta.
‐¿Si la luna estará enamorada?
La pregunta me fue susurrada
por tus labios ardientes y rojos.
‐¡Si la luna estará enamorada!
Y la luna en respuesta callada
largamente besaba tus ojos…
cobijó tu graciosa silueta;
el ocaso, doliente y lejano,
te enmarcaba en su cromo violeta.
El otoño amarillo, tu hermano,
te rezaba una loa secreta…
Te acogiste, temblando, a mi mano,
y a la luna mirabas, inquieta.
‐¿Si la luna estará enamorada?
La pregunta me fue susurrada
por tus labios ardientes y rojos.
‐¡Si la luna estará enamorada!
Y la luna en respuesta callada
largamente besaba tus ojos…
de Lucía Sánchez Saornil,
en Poemas, Starm1919/elsetaproducciones, S/F.